Desde su primera generación -que partió en 2010, y actualizada en 2012-, el crossover citadino de BMW, el X1, tiene muy buenos argumentos que lo mantienen como una interesante opción dentro de la gama de SUV citadinos. En su segunda entrega destaca por un correcto espacio interior para toda la familia, motores con consumos acotados, y manteniendo uno de los atributos de BMW, el placer al manejarlo, pero, entonces, ¿qué es lo que cambió más?. Todo, en esta nueva «camada» casi no guarda relación alguna, a excepción del nombre, por cuanto la serie ahora tiene una nueva disposición mecánica: motor dispuesto transversalmente y tracción delantera (sDrive) o total (xDrive). El modelo saliente tenía motor longitudinal y tracción trasera o total.
Este exitoso modelo de la Serie X (ahora con varios exponentes como el X3, X4, X5 y X6) integra renovadas renovaciones tanto en diseño como en prestaciones. Agrega soluciones tan diversas como motores con tecnología BMW Twin Power Turbo, caja de cambios automática de ocho marchas-, función Auto Start Stop, Brake Energy Regeneration, modo ECO PRO, entre otras soluciones propias de la tecnología BMW EfficientDynamics.
A pesar de los cambios, todavía el X1 2016 combina características de un hatchback compacto y un deportivo utilitario SUV con un aspecto crossover. Está basado en la actual BMW Serie 2 Active Tourer (ver test drive de Rutamotor) y se ubica en la gama por debajo del X3. Básicamente los competidores en Chile (y también en todo el mundo) de este X1 están en el Audi Q3, Land Rover Freelander, RangeRover Evoque, Volkswagen Tiguan, el Mercedes Benz GLA y Volvo XC60. Además también entran en este segmento el Honda CR-V y el Subaru All New Forester, entre otros.
Se fabrica en la planta de BMW en Ratisbona, Alemania, y del que se han vendido más de 730.000 unidades desde 2010. Los precios del nuevo BMW X1 parten en los CLP $25.990.000 hasta los $32.490.000. A la gama de colores existente se suman cuatro nuevos, Kastanien Bronze, Mediterranean Blue, Platinum Silver y Atlantic Grey (todos metalizados).
GAMA GASOLINA:
- BMW X1 sDrive20i (nuestro test): motor de gasolina de cuatro cilindros en línea con tecnología M Performance BMW TwinPower Turbo (Twin-Scroll-Turbo, inyección directa High Precision Injection, sistema de regulación variable de las válvulas VALVETRONIC y doble VANOS).
- Cilindrada: 1.998 cc.
- Potencia: 192 hp a 5.000 – 6.000 rpm.
- Par máximo: 280 Nm a 1.250 – 4.600 rpm.
- Aceleración (0 – 100 km/h): 7.7 segundos.
- Velocidad máxima: 225 km/h.
- Rendimiento combinado*: 11km/l; 16,9km/l 14,1km/l
- Valor de CO2*: 165 g/km.
- Norma de gases de escape: EU6 (En Europa) /EU5 (Chile).
- BMW X1 xDrive20i: motor de gasolina de cuatro cilindros en línea con tecnología BMW TwinPower Turbo (Twin-Scroll-Turbo, inyección directa High Precision Injection, sistema de regulación variable de las válvulas VALVETRONIC y doble VANOS).
- Cilindrada: 1.998 cc.
- Potencia: 192 hp a 5.000 – 6.000 rpm.
- Par máximo: 280 Nm a 1.250 – 4.600 rpm.
- Aceleración (0 – 100 km/h): 7.4 segundos.
- Velocidad máxima: 223 km/h.
- Norma de gases de escape: EU6/EU5
LOS DIESEL:
- BMW X1 sDrive18d: motor diésel de cuatro cilindros en línea con tecnología BMW TwinPower Turbo (unidad turbo de geometría variable, inyección directa por conducto común con inyectores de válvulas electromagnéticas; presión máxima de inyección: 2.000 bar).
- Cilindrada: 1.995 cc.
- Potencia: 150 hp a 4.000 rpm.
- Par máximo: 330 Nm a 1.750 – 2.750 rpm.
- Aceleración (0 – 100 km/h): 9.2 segundos.
- Velocidad máxima: 205 km/h.
- Rendimiento combinado: 22.22– 24.39 km/lt
UN DISEÑO ROMPE ESQUEMAS
BMW nos ha acostumbrando últimamente a jugarretas de diseño, a mostrarnos modelos frente al que no sabemos definir con exactitud (una corriente de diseño cada vez más extendida, no sólo de BMW). Ahora este X1 2016 no llega a ser uno de esos modelos que rompen todos los esquemas y redefine un concepto, no, simplemente conjuga lo mejor de dos mundos, el de los hatchback medianos con comportamiento y aspecto levemente de crossover, esa es la mejor forma en que lo definiríamos. Lo vemos situado como un producto ideal para esos clientes que siempre quisieron llegar a una 4×4 BMW y que hasta ahora no podían, aunque ahora se acerque más a un aspecto de SUV que antes.
Si revisamos los números, veremos que sus dimensiones mantuvo crecimientos y disminución en otras, llegando a los 4.439 mm de largo (-15mm), 1.821mm de ancho (+23mm) y 1.598 mm de alto (+53mm). Su batalla se redujo en 90mm, totalizando los 2.670mm. Su altura libre del suelo es de 183mm, mientras que su capacidad de vadeo es de 25cms. Monta neumáticos Pirelli Cinturato P7 de medida 225/55 R17 con llantas de aleación de aluminio con radios dobles estilo 385.
Agrega ahora unos listones de color negro en la parte inferior de la carrocería, el perfil cuadrado de los pasos de rueda, así como el gran tamaño de las superficies horizontales, los que subrayan sus nuevas formas. Estéticamente en el X1 BMW respetó el ADN de sus modelos SUV, desde que irrumpió en el mercado con el X5 sobretodo en el frontal. En esta nueva generación se ve más como una «X5 más chica», que llama más la atención por fuera es su altura, más baja de lo normal y más cercana a los turismos pero con proporciones de SUV, de crossover.
Personalmente me gusta ahora más que antes la parte delantera, ya que acá integra un frontal agresivo, acompañado de una gran máscara y dos grandes ópticos con leds no tan redondos, ahora con algo de curvas. En la zona media-baja vemos dos neblineros circulares y una parrilla muy BMW. Atrás mejoró, pero se mantiene como la parte menos atractiva, con unas luces posteriores poco llamativas, con un gran portalón central eléctrico, y abajo un parachoques negro y molduras cromadas inferiores, que nos señalan que estamos en frente de un crossover. Lo que suma esta nueva generación es el doble escape cromado, que le da un aspecto más deportivo que la generación anterior.
EQUIPAMIENTO DE SERIE:
- Climatizador automático bizona
- Control crucero con función de frenado
- Caja AT Steptronic ocho marchas
- Pantalla digital de 6,5″ con controlador iDrive
- Sensor de estacionamiento trasero con cámara de retroceso
- Asientos traseros abatibles 40/20/40
- Volante deportivo multifuncional de cuero
- Apoyabrazos adaptable
- Luces de día con tecnología LED
- Freno de mano electrónico
- Driving Experience control con ECO PRO
- Piso maletero plegable
- Performance control
- Bluetooth con Streaming audio
UNA POSICIÓN DE MANEJO MÁS ALTA QUE ANTES
El que manejó el anterior X1 seguramente opinará igual que nosotros, se tenía la sensación de estar bajo para ser un crossover, con sensaciones más cercanas a manejar un hatchback mediano, quizás levemente más alto. Bueno, ello cambió y mucho, ya que la primera impresión al entrar al nuevo X1 es esa postura de manejo alta, muy diferente a la anterior generación- Acá el salto fue radical. Adentro todos los ocupantes podrán disfrutar de una inusual sensación de espaciosidad. En comparación con un sedán, el conductor tiene asientos mucho más elevados. La visibilidad panorámica es excelente y se puede acceder muy fácilmente al interior del auto. Todas las superficies tienen una orientación horizontal con segmentos que ópticamente forman capas individuales superpuestas.
El tablero es típicamente BMW con todos los mandos al alcance de las manos de los ocupantes de los asientos delanteros, además de la ya a estas alturas característica pantalla central que se maneja desde el comando ubicado entre ambas plazas delanteras. El reposabrazos delantero central además dispone de un gran espacio para almacenar objetos. Los asientos integran el revestimiento de cuero Sensatec, sin regulaciones eléctricas.
Los asientos son también más elevados (+36mm los delanteros, +64mm los traseros), por lo que el conductor tiene una visibilidad mejorada. El espacio a la altura de las rodillas de los pasajeros traseros es ahora 37 mm mayor. Los pasajeros de atrás disponen de una tobera adicional central de flujo de aire, sin regulación de temperatura. El volumen del portaequipajes es de 505 litros, 85 litros mayor que la cajuela de su predecesor, que además cuenta con un doble fondo. En los costados del maletero hay espacio para almacenar objetos de menores dimensiones, además de una salida de 12V. Abatiendo los respaldos de los asientos traseros, el volumen de carga puede aumentar hasta 1,550 litros. Además, los respaldos pueden colocarse en relación de 40:20:40; opcionalmente también puede regularse su inclinación.
A pesar de la gran cantidad de botones y pulsadores, no es complicado encontrar una buena posición de manejo y no costará nada superar el agobio de tanta tecnología debido a la correcta distribución de los botones. El habitáculo es bastante espacioso, ofreciendo más comodidad en cualquiera de los cuatro asientos, y también mucho más amplio que antes. Otro hecho de la causa, es la casi ausencia del túnel central, lo que favorece la ganancia de espacio. Además cuenta con numerosos espacios portaobjetos que ofrecen espacio útil adicional. Un vano con tapa en la consola central, los espacios para botellas de hasta 1,5 litros en las puertas, los portavasos de montaje desfasado en la consola central y, además, la consola que va debajo del apoyabrazos central, no son más que algunos ejemplos que confirman el aprovechamiento inteligente del espacio disponible.
El maletero de volumen variable entre 468 y 1.510 litros y el respaldo de serie de los asientos posteriores que puede abatirse en relación de 40:20:40, son expresión de la gran utilidad en el día a día de este nuevo modelo. Los materiales son buenos, no se siente un vehículo lujoso como anteriores generaciones, pero igualmente está bien ensamblado. Además integra un renovado volante y una nueva “botonería” en la zona central, en la consola, que lo hacen ver atractivo. En general los materiales y plásticos son buenos, no excepcionales. Llama la atención la similud de interiores con el Serie 2 Active Tourer, son prácticamente iguales. Ahora, lo que faltó, y mucho, son las regulaciones eléctricas del asiento, sobretodo considerando el alto valor de un X1.
BUENA RESPUESTA EN TODO RANGO
Todos los BMW que conocemos llevan por estandarte la tracción posterior, la trasera. Ahora, en el nuevo X1, hay un cambio importante, pero que según la marca tiene un motivo bastante relevante. Entendiendo que se trata de un vehículo con orientación familiar, se trató de eliminar lo más posible túnel de transmisión se ganó un suelo plano y más espacio disponible en el área del portaequipajes.
Igualmente este X1 tiene muchísimas más cualidades más «on-road» que «off-road», sobre todo si consideramos que esta unidad de pruebas SDrive tiene sólo tracción delantera, lo que hace que el comportamiento cambie, que puede desagradar a los más puristas, por ejemplo en las aceleraciones violentas, que elevan el tren delantero y permitiendo que pierda un poco las trayectorias (pero lo que se corrige regulando la aceleración, y la electrónica ayuda). Una vez manejándolo, y con el pasar de los días ello se olvida, tiene un buen andar. Lo digo porque me sorprendió la respuesta, se siente muy ágil apenas pisamos el acelerador, tanto en bajo como medio régimen, en el que obtendrá una respuesta enérgica e inmediata. Si miramos las cifras,el nuevo X1 con este motor logra una aceleración de 0-100 km/l en 7,7 segundos y una velocidad máxima de 225 km/h.
Esta generación suma la nueva generación de motores Twin Power Turbo que logra acrecentar el placer de conducir y, a la vez, la eficiencia. Mecánicamente cuenta con tecnología BMW TwinPower Turbo: Turbo Twin-Scroll, inyección directa, control variable de las válvulas (VALVETRONIC), control variable de los árboles de levas doble VANOS. Tiene una cilindrada de 1.995 cc, y es capaz de erogar 192 cv de potencia entre las 5.000 y 6.000 rpm y un par máximo de 280 Nm, disponibles entre las 1.250 y 4.600 rpm.
Las cifras homologadas por Consumo Vehicular (3CV) indican un rendimiento de 11 km/l en ciudad; 16,4 km/l en carretera y 13,9 km/l promedio. En Rutamotor logramos un consumo mixto de 12,6 km/l. En todos los modos de manejo (Sport, Comfort y Eco) tiene una buena respueta desde la zona baja del tacómetro, y no se echará de menos más potencia, para nada, ya que responde excelente, tanto en la zona baja, media y alta del tacómetro.
Está bien acompañado por una dirección que encuentro precisa, pero con escasa «información al conductor», lo típico de las direcciones eléctricas. La caja automática responde muy bien, en donde la primera y segunda marchas son corta y desde el tercer cambio hacia la octava son bien escalonadas, sin llegar a ser largas. El paso de los cambios si lo llevamos con las paletas al volante en modo secuencial es más rápido, tanto al subir como bajar marchas. La suspensión está mucho más equilibrada hacia un comportamiento neutro, de buena respuesta y con menos tacto deportivo (lo que los fanáticos aplaudían) que antes. Bueno los tiempos cambian.
En suma este X1 2016 tiene todavía buenos argumentos para mantenerse como un modelo interesante dentro de la gama crossover citadinos, que cada vez se llena más. A pesar de su alza en valores, todavía falla en detalles de equipamiento mejorables.
¿Qué te pareció el BMW X1?, coméntanos.
