El Fiat 124 Spider, un roadster que era básicamente la versión Fiat del Mazda Miata, fue un interesante experimento y quedará simplemente como eso, ya que no tendrá una segunda generación.
El 124 Spider actualmente no alcanza a ser lo suficientemente rentable como para gastar recursos en una nueva versión, a pesar de ser fabricado en la misma línea del Miata. Aunque sea estéticamente más atractivo que la versión Mazda (opinión extendida que se confirma cuando hablamos de la versión Abarth) el hecho que la marca no tenga peso actual en el segmento, pero sí experiencia en las décadas pasadas con una serie de modelos similares, lo hace poco interesante para los compradores.