El Toyota Land Cruiser es conocido como uno de los vehículos stock más capaces y confiables fuera del camino, reconocido en EEUU y sobre todo en mercados de países petroleros, donde abunda combustible para alimentar al demandante motor. A pesar de que la potencia no es uno de sus principales atributos, nuevos informes apuntan a que la próxima generación perderá el motor V8 en favor de un V6 y ayudas electrónicas.
En EEUU y algunos lugares del Medio Oriente, el 4.6 V8 es la única versión disponible (acá llega un 4.0 V6, y también existen versiones diesel) que tiene como gran desventaja su paupérrimo rendimiento, a favor de utilizar una mecánica robusta, confiable y archiconocida. Pero por las cada vez más restrictivas normas de emisiones y consumo, el V8 sería reemplazado por versiones V6 turbo y/o con ayuda híbrida, para mantener potencia y respuesta bajando el consumo y emisiones.
La nueva generación de la Land Cruiser está siendo desarrollada en Australia, donde ha probado ser óptima para desplazarse en el desierto sin mayor problema, salvo su consumo de combustible. No se sabe todavía si la versión de Lexus mantendrá o no la opción V8 disponible.
