Hablar de Walter Röhrl (7 de marzo de 1947, en Ratisbona, Alemania) es hablar de los más alto del rally mundial y el que es considerado como mejor piloto alemán de rally de la historia. Su excepcional reputación en el mundo del campeonato del mundo de rally fue producto sobre todo por su profesionalidad, su talento frío y calculador, siempre obsesionado con las técnicas y secreto del pilotaje.
Este perfeccionismo no dejaba al azar ni el más mínimo detalle y que exigía de sus copilotos un nivel similar de compromiso. Su capacidad de concentración, su autocontrol y la gran inteligencia que demostraba en cada carrera le convirtieron en un piloto temible en sus más de 20 años de carrera en cualquier superficie.
Ganó tanto en nieve, como en asfalto y tierra. La profesionalidad de este alemán le hacía colaborar con sus mecánicos e ingenieros de manera que mejoraba el rendimiento de todo el equipo gracias a su total implicación. En muchas ocasiones sacrificó victorias parciales con la intención de sumar puntos que le ayudaran a el o su marca a estar en lo más alto de la clasificación general.
SUS LOGROS E INICIOS
Su historia con los fierros partió a la temprana edad de 16 años cuando comenzó a trabajar para el obispado de su ciudad natal y pronto se convirtió en su chofer. Este trabajó le permitió recorrer más de 120.000 kilómetros anuales al volante del vehículo del obispado. Su pasión por correr lo llevó a participar en los rallies a los 21 años, en 1968, cuando a bordo de un Fiat 850 Coupe disputó el Rally de Baviera.
Con el paso de los años gue campeón del mundo de rally en 1980 y 1982, subcampeón en 1983 y tercero en 1985, siendo además el primer piloto en lograr dos títulos del mundo. Fue también Campeón de Europa en 1974 y Campeón de África en 1982. Es el único volante que ha ganado los tres campeonatos y el único junto a Miki Biasion que ha ganado el mundial y el europeo.
A lo largo de su carrera en el rally mundial, participó en 75 pruebas logrando un total de 14 victorias y 31 podios, destacando las cuatro conquistas en el Rally de Montecarlo de 1978, 1982, 1983 y 1994, en todas con un automóvil diferente (Fiat 131 Abarth, Opel Ascona 400, Lancia 037 y Audi Quattro). Es destacado por su gran versatilidad, ya que logró imponerse en todas las superficies y condiciones.
Tras la retirada en el mundial siguió compitiendo en carreras de circuito e incluso compitió en la subida a Pikes Peak rompiendo el récord establecido. En los últimos años, ha sido contratado como piloto de pruebas por marcas como Porsche (ver videos).
¿Qué opinas de Walter Röhr, lo conocías?
