Es natural que el advenimiento de la electromovilidad haya puesto un manto de dudas respecto de la continuación de clásicos modelos de la industria automotriz. Lo ha hecho, por ejemplo, con el Porsche 911, el Ford Mustang, el Nissan Z o el Mazda MX-5. Pues ahora respecto del roadster japonés, ha sido la propia Mazda la que ha traído una cuota de respiro a los fanáticos, echando por tierra cualquier posibilidad de que su carismático deportivo de bolsillo sea sentenciado en el corto o mediano plazo. «El Mazda MX-5 nunca va a morir«, dijo Martijn ten Brink, CEO de Mazda Europa, en entrevista con el sitio británico Autocar.
«¿Cómo nos mantenemos fieles al concepto de lo que representa el automóvil llevándolo a una próxima generación de tecnologías?«, respondió el directivo cuando el medio le preguntó acerca de los planes para el próximo MX-5. «Por cierto, aún no está decidido, pero creo que sería justo decir que el MX-5 nunca morirá. Seguirá existiendo para siempre y tendrá que ir a la par de los tiempos. Ese es un gran desafío. La gente siente pasión por este gran auto de Mazda«, acotó.
Ten Brink sumó que la gente tiene opiniones disímiles de cuál es la dirección que el MX-5 debe seguir, de manera que se siente curioso por cómo va a terminar materializándose en la práctica. «Definitivamente continuará siendo parte de nuestro line-up», reiteró. En otro carril, el ejecutivo analizó cómo la necesidad por aerodinámica cambiará los futuros diseños automotrices: «necesitamos pensar el concepto de aerodinámica en una forma diferente. Estamos yendo en la línea de ser más diversos en estos términos y creo que nuestros experimentos en la materia nos moverán en nuevas direcciones. Lo claro es que debemos ser súper aerodinámicos«. Esto último ya lo deslizó Vincent Cobee, jefe de Citroën, quien es de la idea que la electricidad terminará por sepultar los ahora populares SUVs. ¿El motivo? Nuevamente su poca adaptación a los reglas de la aerodinámica.
Por último, el máximo directivo de Mazda en Europa agregó que Mazda no buscará crear modelos diferenciados por región, sino exactamente lo contrario. «Necesitamos ser exitosos en Japón, Australia, Estados Unidos y Europa con prácticamente los mismos vehículos. Este es un desafío mayor para fabricantes más pequeños y una ventaja para los más grandes«, finalizó.
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