A pesar de que Ford es la marca estadounidense tradicional que mejor se ha incorporado al mercado eléctrico, aún no logran equilibrar la balanza y hacer que sus vehículos sean rentables, por lo que siguen vendiendo sólo para no perder mercado.
Esto se supo tras el informe de resultados económicos del primer cuatrimestre. Mientras que los vehículos con motor a combustión interna, tanto particulares como comerciales, son los que entregan beneficios económicos a la compañía, se vio que por cada vehículo eléctrico Ford pierde en promedio 60.000 dólares.
Como la marca ha vendido cerca de 12.000 autos eléctricos en el período, se estima que las pérdidas van por los 700 millones de dólares. Sin embargo esperan dar vuelta la situación, ya que hay muchos factores puntuales y/o externos que han afectado la venta de eléctricos y frenado su capacidad de producción.
Para evitar estas pérdidas esperan logrando escalando la economía de producción. Uno de los tantos hitos por cumplir es la apertura de nuevas megaplantas, tanto de producción de autos eléctricos como de fabricación de baterías, un flanco donde podrían ahorrar mucho dinero al no tener que depender de proveedores externos para el principal elemento de un auto eléctrico.
