Las marcas chinas están determinadas en entrar al codiciado mercado europeo, ya que sería una prueba irrefutable de que su calidad de manufactura es comparable con las marcas tradicionales. La primera gran barrera son las pruebas de seguridad, necesaria para desbancar antiguos estereotipos, algo que lograron superar el Funky Cat y el Coffee 1.
Ambos modelos pertenecen al grupo Great Wall Motor, quien ha demostrado ser una de las marcas que sobresale sobre el resto de connacionales. En las pruebas de la EuroNCAP los dos lograron obtener las cinco estrellas, credenciales que le darán más confianza a quienes opten por alguno de estos modelos.
En el caso del ORA Funky Cat, logró un 92% en protección de adultos y 83% para protección de niños, mientras que el WEY Coffee 01 tuvo un 91% en protección de adultos, y 87% en protección a niños.