Dentro del grupo Jaguar Land Rover tienen la ambiciosa misión de transformarse en una marca totalmente eléctrica dentro de seis años, algo complejo considerando que aún no tienen plataformas que utilicen baterías y sean comercialmente viables. Para superar ese problema, dentro del grupo Chery podrían tener una solución.
En China, la relación entre Jaguar Land Rover y Chery es importante, ya que mantienen una joint venture a iguales partes de participación desde el año 2012, y de la cual han salido fabricados modelos como el Evoque, Land Rover Discovery Sport, y Jaguar XFL. Esa joint venture se podría ampliar para que Chery provea de las plataformas eléctricas que tiene su marca Exeed, con arquitecturas de 800V y autonomías que varían entre 500 y 700 kilómetros por carga.
Recordemos que Exeed es una submarca del grupo Chery, con plataformas y desarrollos propios, que está orientada a entrar al mercado europeo con vehículos tradicionales, híbridos enchufables, y eléctricos, siendo estos últimos los que utilizaría Jaguar Land Rover. Se dice que el primer modelo estaría listo para ser presentado durante este año, y seguramente sería un SUV de Jaguar, orientado a un segmento premium que busca más refinamiento que capacidades todo terreno, ya que seguramente (al igual que el 99,9% de los SUV del mercado) lo más off road que hará será pasar por una poza de agua.
Y en cuanto a los desarrollos eléctricos de la marca inglesa (propiedad de Tata Motors), no les ha ido tan bien como esperaban. Land Rover nunca terminó su plataforma eléctrica, y en Jaguar el mejor exponente fue el I-Pace, que a pesar de tener un diseño interesante, pasó sin pena ni gloria por el mercado, y ya se ve bastante desactualizado comparado con la competencia.
