Como una manera de reducir el impacto ambiental ante la futura carga extra que tendrá el sistema eléctrico de Francia (además de poder bajar su huella de carbono), el presidente Macron aprobó una nueva ley que exige la instalación de techo con paneles solares en parques de estacionamiento automotriz.
La medida será aplicable tanto para futuros espacios de estacionamiento como para lugares existentes (sean techados o no), y dependerá de la cantidad de espacios para estacionar. Los lugares que tengan entre 80 y 400 plazas de estacionamiento deberán hacerlo dentro de los próximos cinco años, mientras que aquellos lugares con capacidad para más de 400 vehículos lo deberán hacer dentro de los próximos tres años.
A pesar de lo costoso que suena la instalación de paneles solares, la ley no ofrece algún tipo de financiamiento o ayudas, pero sí hay algunas excepciones, como aquellos lugares existan restricciones técnicas, arquitectónicas o de seguridad, o aquellos que estén cubiertos en más de la mitad por sombra de árboles existentes.
La ley entrará en vigencia el 1 de julio de 2023. Con esta medida esperan generar hasta 11 GW de potencia eléctrica, con lo que esperan sea suficiente para la arremetida de la movilización eléctrica masiva que se espera para la próxima década.
