Tras cinco años en el mercado, Kia le ha hecho una renovación a la cara del K5, el sedán mediano de la marca, modelo que llegó a reemplazar al Optima retomando también la nomeclatura que utilizan en el mercado coreano.
La renovación va por el lado de modificaciones al frontal, particularmente a los focos led, y líneas que se pueden relacionar con el eléctrico EV6 GT, mientras que en la parte trasera las luces led también sufrieron modificaciones, además del parachoques y la «cola de pato», ahora más pronunciada.
Por dentro los cambios son algo más profundos. Este renovado K5 integra una pantalla curva dual de 12.3″, que abarca el infotainment y el tablero de instrumentos, y carece de botones físicos para su control. Bajo la pantalla central está el control climático, al parecer con botones hápticos o táctiles, mientras que en la parte inferior se encuentra un cargador inalámbrico, y un selector de marchas circular.
Otras novedades incluyen la posibilidad de actualizaciones «over the air» para el sistema de infotainment, controles desde el smartphone, un sistema de identificación por huella dactilar, y un sistema de audio opcional de 12 parlantes, cortesía de KRELL.
Mecánicamente no hay grandes cambios. Las opciones motrices siguen siendo un 2.0 de 158 hp, un 1.6 turbo de 178 hp, y un híbrido de 192 hp. Los cambios van por un ajuste a la suspensión, para un andar más suave y una mejor insonorización del interior.
Este modelo es la versión coreana, que adelanta los cambios que se verán en las versiones para occidente como modelo año 2025.
