Aston Martin es una marca de fuertes raíces británicas, claramente identificable con ese país al igual que Jaguar, o lo mismo que es Ferrari a Italia, o Volkswagen a Alemania. Pero en un mundo globalizado, los dueños se reparten por el mundo.
Uno de los tantos dueños de Aston Martin es la marca china Geely, quienes ya han mostrado interés por otras marcas originalmente europeas, como Volvo y Lotus. Geely el año pasado llegó a un acuerdo para comprar el 7.6% de la propiedad de Aston Martin, y recientemente anunciaron un nuevo salto para aumentar su participación.
El grupo Geely aumentará su propiedad de Aston Martin a un 17%, quedando como el tercer mayor dueño de la marca, detrás del chairman Lawrence Stroll y el fondo de inversión de Arabia Saudita. Con este trato, Aston Martin obtiene liquidez gracias a 118 millones de dólares pagados por Geely, además de un acuerdo que impide a la marca china adquirir más de un 22% como máximo de su propiedad, al menos hasta agosto del 2024.
Esto podría implicar que Geely tiene intenciones de aumentar su propiedad en la marca, para incluso quedar como el accionista principal y hacerse del control de Aston Martin, de lo que se beneficiaría tremendamente con el traspaso de técnicas de fabricación, para mejorar la calidad de sus líneas orientadas al lujo.
