A un mes del Salón de Shanghái 2023 -la feria automotriz hoy convertida en el evento más grande del mundo- todavía queda paño que cortar respecto de sus novedades. Y es que en la muestra de la capital económica china, Great Wall Motors (GWM) no solo presentó sus sorpresas -que involucraron a las marcas Wey, Ora, Haval y Poer- sino que también, y como hecho anexo, el representante local del grupo confirmó que Tank, la marca perteneciente a dicho clan y especialista en 4×4, va a aterrizar en Chile durante el segundo semestre de 2023. Lo hará de mano del pintoresco y aventurero Tank 300: pero, ¿cómo vendrá equipado este 4×4 de chasis de largueros, a la vieja escuela?
Lo primero que habrá que decir es que el Tank 300 es una especie de hermano de la camioneta Poer, al utilizar una derivación de la conocida plataforma P71 sobre la que se afirma esta última (es una jugada que también utiliza Ford para la Ranger y el todoterreno Bronco). Está a la venta desde diciembre de 2020 en el mercado chino y se precia de unas medidas dadas por 4.760 mm de largo, 1.930 mm de ancho y 1.927 mm de alto, con una distancia entre ejes que alcanza los 2.750 mm.
Otros datos interesantes para este aventurero de pura cepa, vienen por el lado del despeje mínimo al piso, que llega a 224 mm y de los ángulos de aproximación y salida, que son de 33º y 34º, respectivamente. Mientras la suspensión delantera es doble horquilla, atrás se recurre a un eje trasero sólido con resortes helicoidales. Los neumáticos son en medida 265/65 R17.
En el interior, el Tank 300 tiene capacidad para cinco ocupantes. Se presenta con un tablero recto, en el que destacan un panel de instrumentos con pantalla de 12.3″, un display central táctil también de 12.3″, salidas de aire redondas (al estilo Mercedes-Benz), dejando en el lado del acompañante una manilla que ya es casi la regla general en los 4×4 recreativos.
Por su parte, la consola central se presenta simple en su operación. Al medio está la palanca de cambios automática, flanqueada tanto por los modos de conducción y tipos de tracción -ambos en ruedas giratorias- y por botones que permiten activar los bloqueos de diferenciales, establecer el Autohold, activar o desactivar la cámara, los sensores de estacionamiento y el control de descenso, además de la función Tank Turn, que permite reducir el radio de giro. La tapicería es en cuero Nappa.
Mecánicamente, el Tank 300 se ofrece con una alternativa convencional de motor térmico y otra con hibridación clásica (vale decir, que no es un Mild Hybrid ni tampoco un híbrido enchufable). Para el primer caso, el Tank 300 está gobernado por un motor gasolinero turboalimentado de 2.0 litros que desarrolla 217 caballos de potencia y 387 Nm de torque máximo, que funciona unido a una transmisión automática de ocho marchas. Puede conducirse en modos 2H, 4H y 4L -seleccionables mediante una rueda en la consola- y cuenta con bloqueo de diferenciales delantero y trasero. En segundo término, el Tank híbrido utiliza el mismo motor de 2.0 litros y cuatro cilindros, aunque esta vez ayudado por la fuerza de la electricidad, para llegar a 300 Hp y nada menos que 640 Nm de torque máximo. En este caso la fuerza se envía permanentemente a los dos ejes a través de la nueva transmisión ‘Hybrid Automatic Transmission’ de nueve relaciones.
¿Qué te parece este 4×4 de inspiración y naturaleza clásica? ¿Quieres verlo en motor ‘convencional’ o te parece una buena propuesta su alternativa híbrida? ¡Coméntanos!
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