Lamborghini es una de las pocas marcas que ha ofrecido casi de forma permanente en su historia última un motor V12 atmosférico en sus modelos. Pero ya salió de la línea de fabricación el último de estos ejemplares, montado sobre el (también) último Aventador.
El Aventador también termina su ciclo de vida, tras 11 años de producción. El último modelo en salir de la línea de fabricación fue el LP 780-4 Ultimae Roadster, un modelo especial personalizado por la división interior de la compañía, y que tendrá como destino final un afortunado dueño en Suiza.
Así es como se acaba la historia de los 12 cilindros en Lamborghini, al menos funcionando solos, siendo el último ejemplar un 6.5 V12 en 60°. Los siguientes modelos tendrán bloques V8 o V12 híbridos, para ayudar a reducir el consumo de combustible, y seguramente mejorar la experiencia y respuesta, pero que según los más puristas le quitarán parte de la reacción visceral y el sonido del V12 trabajando en solitario.
