Hace unos días te contamos del Seagull, el pequeño eléctrico de la firma BYD que por estos días se encuentra a prueba por las calles de Santiago (hay dos unidades). Antes que aquel -y con boletos ya timbrados para aterrizar en Chile- tocará conocer a uno de sus hermanos mayores: el BYD Seal, que en septiembre se podrá a la venta localmente para convertirse en una alternativa más asequible del señorial Han. El BYD Seal (se traduce como ‘foca’) se precia de una autonomía que supera los 500 kilómetros y una puesta a punto muy inspirada en la deportividad. Anda y mucho…
Producido desde 2022 en el centro industrial de Changzhou, al este de China, el Seal es un modelo encasillado en el segmento D. Salió de la pluma del afamado diseñador alemán Wolfgang Egger -ex Alfa Romeo, Seat, Lancia, Audi y Lamborghini- quien se guió por el principio elemental de la búsqueda de inspiración natural «apelando a la riqueza emocional y reconocible de los océanos». En su base ingenieril, el BYD Seal es otro de los automóviles en recurrir a la arquitectura e-Platform 3.0 que le permite ofrecerse tanto como un tracción trasera o un integral. En cualquier caso, el Seal para cinco ocupantes cuenta con dimensiones dadas por 4.800 mm de largo, 1.875 mm de ancho y 1.460 de alto, con una distancia entre ejes de 2.920 mm, un maletero de 400 litros y unas elegantes llantas de aleación de 19”. Su coeficiente aerodinámico es de 0.21.
En su configuración mejor equipada -la que llegaría a Chile- el BYD Seal cuenta con iluminación full LED, luces DRL LED, techo panorámico, grilla activa (permite refrigeración cuando es necesario), sensor de lluvia, espejos de ajuste y rebatimiento eléctrico, tapicería en cuero, volante de tres radios forrado en piel, cluster de 10.25”, pantalla central giratoria de 15.6” con Apple CarPlay y Android Auto (con actualizaciones remotas), 12 altavoces Dynaudio, head-up display, butacas delanteras de ajuste eléctrico, climatizador de doble zona y cargador inductivo delantero y puertos USB A y C delanteros y traseros.
En materia de seguridad, la oferta abre con los tradicionales frenos de discos en ambos ejes, las seis bolsas de aire, monitor de subinflado de neumáticos y control de partida en pendientes, además de las asistencias avanzadas a la conducción como monitor de punto ciego, advertencia de apertura de puertas, control crucero adaptativo, asistente de mantenimiento de carril, alerta de tráfico cruzado trasero con intervención, alerta de colisión frontal con frenado de emergencia autónomo y el asistente de conducción en tacos, que avisa si el auto de adelante ya avanzó (y el conductor aún no se ha movido).
Finalmente, en lo estrictamente técnico, el sedán de silueta fastback cuenta con un motor trasero de 230 kW (308 caballos) y 360 Nm, más un propulsor delantero que alcanza los 160 kW (215 Hp) y los 310 Nm de fuerza de torsión. La potencia combinada es de 390 kW (vale decir 523 caballos) y de 670 Nm, suficiente empuje para un 0 a 100 km/h de 3,8 segundos. El sistema toma su energía de un paquete de baterías de 82,5 kWh de capacidad, que logra una autonomía de acuerdo con el ciclo WLTP de 520 km.
Desde BYD Chile se adelantó que el modelo Seal estará a la venta en septiembre o durante el último trimestre, y que podría llegar por un precio aproximado de $ 40 millones.
¿Qué te parece el próximo miembro que se unirá a la familia de BYD en el país? ¡Coméntanos!
Actualización del 10 de octubre de 2023:
