El Superb ha sido por historia el Škoda más grande del line-up y acumula hasta hoy más de 1.5 millones de unidades comercializadas. Si bien se trata de un automóvil que está lejos de ser el más popular -pues ese título le corresponde más al Fabia o el Octavia- sí es un vehículo que permite a la firma del Grupo Volkswagen exhibir su filosofía Simply Clever con atributos como la practicidad y el generoso espacio interior, llevado en este caso al segmento D. Ahora los checos afinan detalles para poner en escena la cuarta generación del más grande de su camada y acaban de aportar nuevos detalles para el inminente debut de noviembre (ya habían exhibido su silueta en abril).
Lo primero que habrá que decir, es que el legado del Superb está dividido en dos: en 1934, Škoda lanzó el 640 Superb, un vehículo de 5.5 metros de largo, capaz de llevar a ocho ocupantes. Estuvo impulsado por un motor de seis cilindros 2.5 litros, que desarrollaba 55 caballos. Esa historia concluyó en 1949 y no fue hasta 2001 cuando la compañía de Mladá Boleslav miró a su pasado y puso en escena el Superb de la era moderna. La segunda generación llegó en 2008 y la tercera le sucedió en 2015, convirtiéndose en el primer Škoda en ofrecerse con climatizador de tres zonas y en estar disponible en versión Plug-in Hybrid. Ahora es momento del siguiente capítulo.
En esta nueva entrega, el buque insignia checo volverá a estar en carrocerías sedán -de 4.91 m- y station wagon -de 4.90 m-, que mejoran sus capacidades de maletero. En el caso del tres cuerpos, ahora se estaciona en 645 litros, en tanto que el estate avanza hasta los 690 litros.
En el apartado de motorizaciones –y según detalla el comunicado de prensa– habrá opciones bencina, diésel y PHEV (Plug-in Hybrid Electric Vehicle), con potencias entre los 150 (con el 1.5 TSI, que es híbrido ligero) y los 265 caballos (con el 2.0 TSI), en cualquier caso asociadas a transmisión doble embrague de tipo húmedo, de seis marchas en la versión híbrida enchufable, y de siete cambios en el resto del line-up. La tracción integral se reserva para las opciones más potentes en bencina y diésel (el 2.0 TSI de 265 Hp y el 2.0 TDI de 193 caballos).
Por otra parte, Škoda sostiene que el nuevo Superb PHEV -que se basa en el motor 1.5 TSI y eroga 204 Hp- puede rodar más de 100 km en modo EV, gracias a que la antigua batería de 12.7 kWh fue sustituida por una de más del doble de capacidad (25.7 kWh).
Al interior, los mayores cambios residen en el sistema de infoentretención, que esta vez es de 12.9″ y en el selector de la transmisión, que ya no está en la consola, sino que se ha trasladado a la columna de dirección (al estilo Mercedes-Benz), ahorrando espacio y permitiendo mayor modularidad.
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