BYD va en serio para intentar ser «uno de los grandes» en la era de los autos eléctricos. El año pasado logró destronar a Tesla como el fabricante de autos eléctricos más grande del mundo, y junto a una oferta renovada, desde auténticos citycars económicos hasta modelos premium, ahora planea expandirse por el mundo.
Una de las primeras paradas será en Mexico, donde la marca está actualmente buscando una ubicación para una nueva planta de fabricación y ensamblaje, que pretenden ubicar en un radio de 200 kilómetros de la Ciudad de Mexico, algo que se debería definir totalmente a mediados de este año. La ubicación depende de la logística, costos de transportes, y porque también cerca estará la mayoría de los compradores del país.
Al otro lado de la frontera miran este movimiento con escepticismo y algo de precaución, ya que estarán literalmente al lado, listos para ofrecer vehículos que (teóricamente) son mucho más baratos, y prácticamente imposibles de lograr para las marcas estadounidense por los costos de fabricación.
Pero para gracia de ellos, desde BYD aseguraron que no pretenden entrar al mercado estadounidense, y la fabricación será para suplir la oferta local, y seguramente la de Latinoamérica también, complementada con la nueva planta que construirán en Brasil, donde el Dolphin fue presentado y ya es un éxito.
