El futuro de Mini está estrechamente ligado a la electricidad, y así lo evidencia la marca británica con el adelanto de la nueva generación de sus modelos, una que se caracterizará por el lenguaje de diseño denominado Simplicidad Carismática. Según detalla Mini, esta nueva forma de hacer fusiona los valores tradicionales de la firma con la tecnología más avanzada.
«El principio de la Simplicidad Carismática es un diseño que ayuda a que cada nuevo modelo de Mini desarrolle un fuerte carácter individual propio, centrándose intuitivamente en la esencia de la marca con un lenguaje de diseño claro y reducido. Otro factor central del nuevo lenguaje de diseño es la elección de los materiales con un ojo puesto en la sostenibilidad. La próxima generación de modelos Mini tiene un interior sin cuero y prescinde casi por completo de elementos cromados«, añade la histórica compañía que popularizó el esquema de motor térmico transversal y tracción delantera.
Como resulta lógico, la arquitectura de los vehículos de la nueva generación de Mini se ha desarrollado desde el principio para la movilidad eléctrica, lo que se traduce en que cada mm del espacio se utiliza de forma aún más eficiente para el confort, el bienestar, la experiencia emocional y el placer de conducir de los ocupantes. «Los modelos de propulsión eléctrica nos brindan una oportunidad única de replantear nuestro diseño y, al mismo tiempo, mantenemos la atención al detalle, el sentido de la tradición y la pasión por la innovación por los que Mini es reconocido«, añadió Oliver Heilmer, Jefe de Diseño de la marca del Grupo BMW.
La nueva generación de Mini será inaugurada por el modelo de tres puertas, al que seguirá el sucesor del actual Countryman. La compañía inglesa adelanta también que en julio próximo exhibirá un avance completo de la Simplicidad Carismática a través de un crossover conceptual.
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