Este año se cumplen casi 25 años años de conmemoración de la introducción del primer Legacy. Y desde noviembre de 2013 que Subaru Chile (una empresa Indumotora) vende en el país una nueva versión de su clásico sedán, la X-Edition, un modelo especial dentro de la gama, en donde tenemos las versiones 2.0, 2.5 y 2.5 turbo (GT, con precios desde los CLP 11.990.000 (con bono) hasta los CLP $ 20.790.000 (con bono). Esta versión especial más alta y mejorada también se comercializa en los mercados chino y europeo (donde se conoce como Legacy 2.5i Luxury).
Integra además un alto nivel de equipamiento y su precio único es de CLP $16.590.000 y su competencia la situan en el Opel Insignia, Renault Avensis, Mazda5, Peugeot 508, Nissan Altima 2.5, Toyota Camry, entre otros. La gama de colores del Legacy X Edition contampla sólo tres tonalidades: blanco satín perlado, plateado hielo metálico y gris oscuro metálico (nuestro test).
SUBARU LEGACY LISTA DE PRECIOS FEBRERO 2014:
- Legacy 2.0i 4D AWD CVT XS: CLP $13.990.000 (con bono durante febrero de CLP $2.000.000 hasta los CLP $11.990.000)
- Legacy 2.5i 4D AWD CVT Limited: CLP $17.590.000 (con bono durante febrero de CLP $2.000.000 hasta los CLP $15.590.000)
- Legacy 2.5i 4D AWD CVT X-Edition: CLP $16.590.000 (nuestro test)
- LEgacy 2.5GT 4D AWD 5AT SI Drive: CLP $21.790.000 (con bono durante febrero de CLP $1.000.000 hasta los CLP $20.790.000)
MÁS CERCA DE UNA OUTBACK
A simple vista, podría pasar como un Legacy más, pero si lo observamos más detenidamente, las diferencias con sus hermanos de gama como el 2.0i XS y 2.5i Limited son evidentes. Por fuera, sus dimensiones están ligeramente modificadas, salvo su longitud que se mantiene en los 4.745 mm. Su ancho aumentó en 40 mm, llegando a los 1.820 mm. Su altura se vio favorecida con un aumento de 60 mm, alcanzando los 1.575 mm, mientras que su batalla se redujo en apenas 5mm, con 2.745 mm.
Con sus mejoras exterior, se mantiene «muy japonés». Al rente suma unos nuevos faros más angulosos que no ocultan su origen. Por el costado es alto, con puertas con marco (en la generación anterior no las tenía), lo que se traduce en una mayor rigidez estructural. No obstante, toda esa deportividad encuentro que se “apaga” cuando llegamos a la parte posterior, mucho más sobria y generalista que el resto. Importante es que sepan que ahora llega con un solo escape atrás, elemento estético que le sumaba atractivo a todas las versiones de la generación anterior. Ahora las salidas dobles sólo vienen disponibles en el 2.5 GT.
Su distancia mínima del suelo es idéntica a la de una Outback diésel con 200 mm de despeje. Se reconoce por fuera, puesto que monta de serie neumáticos Yokohama de medida 225/55 R18 de 10 rayos dobles en exclusivo diseño bitono (gris claro/grafito). Otros cambios menores afectan el zócalo con la inclusión de una llamativa banda cromada bajo las dos puertas laterales y la inclusión de un deflector central de aire con otra banda cromada central. Un monograma X Edition se ubica en extremo derecho inferior de la tapa del maletero bajo el cromado Legacy.
El interior es muy amplio. Todos los controles están a la mano y la calidad de los materiales es muy buena. El espacio atrás es considerablemente mejor que en la generación pasada, aunque un poco más reducida en el espacio para las rodillas, aunque la altura disponible y ancho son bastante destacables. Los asientos delanteros son bastante amplios y más orientados a la comodidad que a la deportividad. Ofrecen un buen soporte lateral y para la espalda. El asiento del piloto tiene reglaje eléctrico en su desplazamiento lineal, inclinación del respaldo y soporte lumbar.
El renovado tablero presenta líneas rectas con materiales de buena calidad. Un guiño a la deportividad, es la presencia masiva de inserciones de imitación madera (reemplaza a las de aluminio en esta versión) por toda la consola. En el equipamiento hay casi de todo: cuero, llantas 18”, freno de estacionamiento automático, asistente de arranque en subida (hill holder) y más. No obstante, echamos y mucho de menos elementos como el sensor de estacionamiento y seguros de puertas sensibles a la velocidad. Nuestra unidad contaba con techo eléctrico, radio mp3 pero sin USB, de un audio notable. Además la versión X Edition agrega el sistema Protección Total Subaru que considera el que considera: inmovilizador, DataDot y iKey Truck Subaru. Además de el sistema Smart Key con acceso y encendido de motor sin llave.
Además hay ciertos detalles mejorables como el display del computador abordo, que es muy poco legible y las pantallas tanto de la radio y el climatizador se ven muy poco. Algo que constituye una novedad absoluta en este facelift es la pantalla central digital color, que indica parámetros como el odómetro y un ecomómetro.
Como en todas la versiones, agrega freno de mano eléctrico, mando se ubica abajo del selector de la caja. Los lugares para guardar cosas sobran y todo está bien distrubuido. También destacamos la visibilidad interior, gracias a las grandes zonas acristaladas y a los espejos laterales muy grandes que parecen de SUV. La parte trasera tiene una tapa de maletero pequeña y albergar hasta 476 litros de equipaje.
MOTOR POTENCIADO
Mecánicamente, bajo el motor cuenta con una planta motriz bencinera boxer de cuatro cilindros DOHC con 2.498 cc de desplazamiento (versus los 2.457 c.c. del Limited) que entrega una potencia de 173 HP a 5.600 vueltas y un torque total de 24 kgfm a 4.100 revoluciones. La fuerza del motor es transmitida por medio de una caja CVT Lineartronic con modo manual de seis relaciones con Paddle Shift.
Por motorización, el 2.5i X-Edition e ubica un peldaño por debajo del tope de línea (2.5 GT Turbo de 265 CV) pero por manejo el Legacy X-Edition es netamente un sedán, aunque con un mayor despeje. Mantiene las características de todo Subaru, es decir un sedán mediano dócil, nada violento y de una aceleración muy pareja. Eso si, la combinación de la puesta a punto con el sistema de tracción le otorga una conducción levemente ágil y más que nada precisa a pesar de su tamaño.
La caja de cambios, de variación continua Lineartronic (CVT) ofrece respuestas interesantes en la aceleraciones desde ralentí, pero sin llegar a sorprendernos, puesto que no oculta su lado enfocado a un andar suave. Cosa que sus potenciales clientes agradecerán. La dirección es muy suave, con un feeling regular y no es tan rápida como en otro modelos de la competencia. También destaca tanto en uso urbano como carretera por su facilidad de conducción. En autopistas las recuperaciones son progresivas y no violentas, y le falta algo más de empuje en el rango medio-alto. La suma de la tracción a las cuatro ruedas, los 1.5 toneladas de peso, hacen que los 173 CV atmosféricos se queden cortos si esperamos una respuesta contundente. Para un uso “normal” es suficiente.
En curvas, y a pesar de su mayor altura, demostró un funcionamiento excelente. Aquí es dónde se aprecian las ventajas de la tracción total AWD (Symmetrical All-Wheel Drive) y el bajo centro de gravedad que proporciona el motor boxer. Aunque en maniobras más violentas, apreciaremos que la suspensión no copia todo, ya que está seteada para la comodidad, y se siente más bien blanda. Las frenadas en general son bastante contundentes, pero ello siempre al aplicar fuerte los frenos, permite poca dosificación.
En suma esta nueva versión con mayor despeje del ya clásico Legacy mantiene lo bueno de siempre, es decir su andar, comodidad, insonorización y seguridad. Que mejor que tener un mayor despeje, para mirar a todos desde arriba y no preocuparte por los lomos de toro, ¿ah?.
¿Qué te pareció el Subaru Legacy X-Edition 2014?, coméntanos.
