Hace no mucho que Subaru estrenó la nueva generación del Impreza, el primer modelo de la compañía que utiliza la nueva arquitectura global, que es casi el doble de rígida y resistente que la anterior. Y después del Impreza es el turno de estrenar al nuevo XV.
Su estreno al público será en el salón del automóvil de Ginebra esta semana, razón por la cual aún no hay imágenes del interior, pero lo más probable es que mantenga el interior del nuevo Impreza. Comparado con el modelo actual, a vista rápida pareciera más que nada un facelift con cambio de focos, ya que han optado por hacer modificaciones leves a lo existente (a nivel estético) en lugar de hacer un cambio sustancial, como fue hace dos generaciones atrás.
Como dijmos previamente, el chasis es por donde vienen las mayores mejoras y diferencias, ya que ganó entre un 70 y 100% de resistencia y rigidez. Esto significará una mejora sustancial en la sensación de manejo, comfort general, y seguridad a los pasajeros. La suspensión y la dirección también tuvo una mejora y reajuste general para una mejor respuesta.
Bajo el capot sigue el motor 2.0 Boxer de 158 hp y 196 Nm, que tuvo un pequeño aumento de potencia (principal queja de los usuarios) gracias a la revisión y modificación de casi un 80% de partes internas. El motor estará conectado a la transmisión CVT Lineartronic de 7 marchas en modo manual, aunque es probable que esté disponible también una automática de 6 marchas. El control de tracción X-Mode también se ha mejorado, para optimizar el control del motor y la tracción cuando haya resbalamiento de una o más ruedas.
Una vez que sea desvelado completamente el modelo sepamos más de sus versiones y precios, pero ya adelantaron que durante este año saldrá a la venta.
