La fibra de carbono se está acercando cada vez más a los vehículos de producción masiva, dejando de ser casi exclusivo para superdeportivos o de precios prohibitivos (aunque tampoco digamos que el nuevo Serie 7 será accesible para cualquier hijo de vecino)
Uno de los primeros realmente de producción masiva y que utilice una cantidad importante de fibra de carbono será el proximo Serie 7 de BMW, que tendrá un chasis hecho de una mezcla de acero de alta resistencia, aluminio, y fibra de carbono, logrando bajar el peso del chasis en cerca de 40 kg con respecto al modelo anterior. Además este material cumple la función de ser un disipador de energía, por lo que actúa en uniones específicas del chasis.
Con esto BMW se adelanta a sus principales rivales, quienes tienen como carta de presentación un chasis de aluminio, como es el caso de Cadillac con su próximo CT6 y Audi con el chasis híbrido en sus nuevos modelos. Mercedes Benz por su parte prepara una alternativa similar para el Clase S.
