Opel Grandland X 1.6T 163 CV 6AT Innovation: Renacimiento

por Equipo Rutamotor

Opel ya tiene disponible en el mercado nacional su cuarto modelo, el nuevo Grandland X, su tercer integrante de la familia X, con que la marca alemana destina a los miembros pertenecientes a la tipología de los SUV´s. Recordemos que la renovación de portafolio comenzó en enero pasado con el «Facelift» de su SUV de entrada Mokka, al que se sumaron en mayo pasado los nuevos Insignia Grand Sport y Crossland X.

[polldaddy poll=10104739]

Grandland X, comparte plataforma con el Peugeot 3008. Entre sus competidores más relevantes podemos mencionar el Hyundai Tucson, KIA Sportage, Nissan Qashqai y Subaru XV. Aterriza en Chile en dos niveles de equipamiento: Enjoy e Innovation, con una motorización gasolinera, 1.6 turbo con 163 HP, con un par de 240 Nm entre las 1.700 y 3.000 vueltas, asociado a una caja automática de seis relaciones con modo secuencial Quickshift.

[gview file=»https://www.rutamotor.com/wp-content/uploads/2018/09/CL_Grandland_X_2018.pdf»]

OPEL GRANDLAND X PRECIOS SEPTIEMBRE DE 2018:

  • Grandland X 1.6T 163 CV 6AT Enjoy: CLP $ $16.290.000
  • Grandland X 1.5T 163 CV 6AT Innovation: CLP $18.990.000 (nuestro test)

Agrega el sistema de plegado rápido FlexFold hace desaparecer una o las dos partes del asiento trasero con un movimiento de la mano (asiento trasero divisible en 40/60. En cuanto a su equipamiento, éste resulta bastante completo, les señalamos los items más relevantes en la variante Enjoy:

  • 8 Airbags.
  • Asientos delanteros calefaccionados.
  • Volante calefaccionado.
  • Sensores de proximidad delantero y trasero.
  • Sistema de infoentretenimiento táctil de 7″ compatible con Apple Car Play y Android Auto.
  • Asientos AGR.
  • Defroster delantero gracias al avanzado parabrisas térmico ThermaTec1, que ofrece rápidamente plena
    visibilidad. Quitar la nieve o rascar el hielo ya son cosas del pasado.
  • Techo panorámico fijo con cortinilla eléctrica.
  • Espejos abatibles eléctricamente.
  • Control de presión de neumáticos.
  • Sistema de reconocimiento de señales de tránsito.

La variante Innovation (que probamos) agrega:

  • Asientos traseros calefaccionados.
  • Sistema de infoentretenimiento de 8″ con GPS Navegación Navi 5.0 IntelliLink .
  • Alerta de punto ciego.
  • Cámara de 360º.
  • Asistente avanzado de estacionamiento.
  • Techo negro
  • Sistema Keyless.
  • Sensor de lluvia.
  • Asistente de luces altas.
  • Asientos de cuero, delanteros ventilados.
  • Llantas aro 19.
  • Luces delanteras LED con AFL.
  • Portalón trasero eléctrico con sistema manos libres. Con solo pasar un pie bajo el parachoques se puede abrir.

LOOK CON ADN FRANCO-ALEMÁN

Sus dimensiones alcanzan los 4.477 mm de largo; 1.856 mm de ancho y una altura de 1.609 mm., con una batalla que llega a los 2.675 mm. Sus líneas se asemejan en buena manera a las de su hermano 3008, pero con ciertas diferencias que se manifiestan básicamente desde el frente, con un aspecto más agresivo y simple, si lo comparamos con el SUV francés. Lo que más gusta es esa atractiva combinación de carrocería/ techo bitono con unas llantas 19′ de cinco rayos diamantadas bastante atractivas. acopladas a unos neumáticos Continental ContiSportContact de medida 225/50 R19

Si la miramos en detalle y más en general, veremos que el nuevo Opel Grandland X destaca básicamente por sus proporciones bien balanceadas con un frontal robusto y que mantiene a su vez ese «alemán», es decir unos grupos ópticos largos (con leds) colocados bien a los lados y  una parrilla grande con el logo Opel al centro», abajo los leds de posición, colocados más bien en la zona media. Su capó es largo y plano entregando una mayor sensación de dinamismo. En la protección a lo largo del vehículo destaca el ancho de sus ruedas y atrás unos planos y modernos ópticos le dan la terminación necesaria a un conjunto muy llamativo (con leds). Su línea de cintura es alta llegando muy arriba en la zona posterior, acompañado por un portalón más pequeño que en otros SUV, y más cercano a lo que ofrecen hoy los crossover.

UN INTERIOR SENCILLO Y CONVENCIONAL

La gran, gran diferencia de este Grandland X frente a su «hermano» Peugeot 3008 es en su interior, acá es completo distinto, en donde no veremos esa gran pantalla con el concepto i-Cockpit, incluyendo una pantalla de instrumentos de 12.3 pulgadas, que al principio abruma para la gran cantidad y opciones que maneja. Acá es todo lo contrario, es muy minimalista. Si lo comparamos con la elegancia y sofisticación de su hermano galo, el Grandland X, exhibe una cabina que resulta más convencional y sencilla, pero no por ello de inferior calidad, aunque si nos hubiese gustado ver elementos de tecnología avanzada como los que prontamente los vistos en el nuevo Opel Insignia.

En la unidad mostrada, comprobamos que la elevada posición de los asientos ofrece una relajante visibilidad. Y los Asientos Ergonómicos con Certificación AGR (Campaña para Espaldas Saludables) con calefacción y ventilación convierten los viajes largos en un cómodo paseo, es dentro de sus puntos fuertes. La manejamos por más de 500 kilómetros en la semana de pruebas y no nos cansó manejarla, es un elemento demasiado importante si tenemos un vehículo que usaremos muchos kilómetros. Ah, estos se ajustan eléctricamente hasta en 16 direcciones pulsando los botones laterales.

Entran cómodamente cuatro personas, una quinta irá más apretada atrás, Hay buenas dimensiones en alto, largo y ancho, prácticamente las mismas que el 3008. También destaca su capacidad de carga que pasar de los 514 litros iniciales a disponer de 1.652 litros de capacidad máxima plegando los asientos traseros. Tanto su tablero como consola son bastante simple, con muy pocos botones. Por ejemplo, los relojes del sinóptico tienen las típicas esferas con el velocímetro y tacómetro, con otros pequeños para temperatura motor y estanque de combustible. Al centro un display digital con el computador abordo y los testigos clásicos.

 Tiene una excelente calidad en las terminaciones y ello se aprecia en las puertas y los polímeros blandos de la consola, así como todos los cromados. Eso si, encontramos que hay pocos portaobjetos (de hecho en las delanteras existe la posibilidad de poner sólo una botella, con el espacio justo). Ahora, también hay lugares para dejar cosas junto a la guantera central y debajo de la consola aunque es más pequeño. La posición ideal de manejo es fácil de conseguir. La visibilidad es buena hacia adelante, con una posición de manejo alta, pero lo justo, no como en otros SUV en los que se va mucho más alto, acá un poco menos más, cercana de los monovolumenes. La visibilidad hacia atrás es mucho más limitada, con un portalón trasero compacto, lo que perjudica la visibilidad. Eso si, los espejos son grandes y como tiene asistencias como cámaras y sensores, ello, en parte, se ve compensado, sobre todo al estacionar.

1.6T DE 163 CV: EQUILIBRIO TOTAL

Este nuevo Grandland X integra un ya «clásico» bloque motor de origen BMW, el 1.6 THP (Turbo High Presure) que ya integran hace años muchos modelos del grupo PSA (Peugeot, Citroen, DS y ahora Opel). En esta configuración, el 1.6T pasó de los 164 caballos que tiene el 3008 a 163 caballos, un par de HPs menos. Se sienten bastante y tiene muy buen torque en bajas RPM (240 NM a 1.700 vueltas), que permite unas muy buenas prestaciones, bajos consumos, agilidad de conducción, seguridad y confianza al volante. El 3CV homologa 9,1 km/l en ciudad, 16,5 km/l en carretera y 12,9 km/l de consumo mixto (Consumo Vehícular), más menos entre uno a dos km/l menos que el equivalente en el Peugeot 3008. En la prueba de Rutamotor logramos un promedio de 12,1 km/l.

Tiene un andar muy suave, similar al 3008. No es de esos SUV que «cabecean» o se siente lenta al moverlo. Puede ser muy suave y si la apuramos entrega sensaciones de agilidad. Apenas hay leves inclinaciones en curva, siempre hay que saber que estamos frente a un vehículo familiar con un centro de gravedad mucho más alto que en un hatchback. Es un producto de un manejo muy equilibrado, excelente, con una suspensión con un compromiso especialmente bueno entre comodidad y una excelente tenida de ruta, es ideal para el día a día para todo tipo de manejo y acompañado por un correcto consumo.

Otro punto alto es la respuesta de la caja automática de seis marchas disponible en toda la gama. Es rápida, suave y permite llevar a este Grandland X con precisión, con respuestas satisfactorias tanto al partir desde un semáforo, como al recuperar velocidad en carretera, el conjunto motor-caja acá es óptimo. Además, es muy silenciosa. La dirección es directa y comunicativa. Tiene buen tacto. El tacto de los frenos es excelente, responde muy rápido pero a la vez es muy dosificable, con una capacidad de frenaje excelente. 

Concluimos que el nuevo Opel Grandland X es un producto interesante, bien equilibrado en todo su conjunto motor/caja/suspensión. Además luce bien- La marca está en etapa de crecimiento después de su salida de General Motors, con productos interesantes. ¿Qué opinas?

Noticias

Adblocker Detectado

Por favor desactive su AdBlocker, para poder visualizar nuestro sitio web y activar la publicidad, que gracias a ello nos ayudan a seguir creando contenido para todos ustedes. ¡Gracias!