–“Mad Max: Furia en el Camino” (2015) es el cuarto capítulo de la saga iniciada en 1979 en que sus personajes deben manejar curiosos vehículos cuya seguridad no está para nada garantizada en un futuro sin ninguna esperanza.
Por: Gaspar Gajardo H ([email protected])
En 1979 “Mad Max” se transformó en un suceso en Australia y rápidamente empezó a llamar la atención de los medios internacionales. Con apenas 34 años, el director George Miller debutaba en el cine con la idea de ilustrar un
futuro en que un policía llamado Max Rockatansky (Mel Gibson) trataba de mantener el orden en un mundo perturbado por la falta de combustible y la violencia de las pandillas motorizadas. A primera vista parecía un filme más de ciencia ficción. Sin embargo, sus secuencias de acción marcaban distancia con lo que los espectadores habían visto hasta ese minuto.
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TODO ES REAL
De acuerdo a testimonios de los propios realizadores, las persecuciones en autos y motocicletas exhibidas en “Mad Max” fueron reales. Un total de catorce motos Kawasaki y varios vehículos Ford (dos de ellos XB y un XA) fueron empleados así como cuanto doble estuviera dispuesto a sacar adelante las escenas ideadas por Miller.
Si bien ninguno de los pilotos perdió la vida delante de las cámaras, las lesiones fueron inevitables y en muchos casos, muy serias, pero el éxito de la película se transformó en una compensación más que aceptable y que vino acompañada de una secuela.
“El Guerrero de la Carretera” (1981) no sólo aumentó la adrenalina en términos visuales, sino que también incorporó una curiosa aeronave llamada girocóptero que utilizaba dos hélices para poder elevarse y que participó en varios de los minutos más recordados del filme. Las acrobacias de esta segunda entrega fueron todavía más arriesgadas y las ganancias aún mayores que su predecesora. Además, fue considerada entre los mejores estrenos de la década por diversos medios especializados.
DE VUELTA A LO BÁSICO
“Más Allá de la Cúpula del Trueno” (1985) disminuyó la violencia para atraer a un número mayor de espectadores a las salas, lo cual se logró aunque muchos echaban de menos la osadía que acompañaba al “Loco Max”.
Con un elenco encabezado por Tom Hardy, “Furia en el Camino” promete volver a conectar a las audiencias con lo que experimentaron en 1981, o sea, persecuciones extremas a cargo de audaces dobles de acción pero haciendo uso de los últimos avances en tecnología cinematográfica.
Una combinación que recibió elogios de los pocos que la han visto, pero que todavía deberá pasar su prueba más difícil, la reacción de un público que más asocia al personaje con la “particular” conducta de Mel Gibson en los últimos diez años que con los méritos cinematográficos de esta saga que nació como una alternativa frente a otras propuestas de ciencia ficción ambientadas en una galaxia muy, muy lejana.
