Uno de los vehículos de mayor éxito de la firma china JAC, sobre todo en el segmento comercial es la Refine, la que aterrizó en Chile ya en su cuarta generación. Está totalmente renovada, en una configuración para 10 pasajeros a un valor de CLP $16.172.100 (IVA incluido), la unidad que probamos en Rutamotor. Básicamente la competencia se sitúa en la Hyundai H-1 y la nueva Maxus G10. Cuenta con una garantía de tres años o 100,000 kilómetros.
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La primera generación de la JAC Refine generó un gran hito de la marca en Chile, logrando comercializar en siete años – de 2009 a 2016- más de 3.000 unidades. En esta versión 2019 el modelo mejora bastante, En cuanto a su capacidad de carga alcanza los 745 kg.
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Entre su equipamiento destacado suma: neblineros delanteros y traseros, llantas de aleación aro 15”, entre otros. Adentro agrega una nuevas butacas; aire acondicionado bi-zona; ventanas traseras de apertura manual; posavasos traseros; cargador USB delantero y trasero; cierre centralizado de puertas; asientos con tapiz de tela; volante multifunción con tapiz de cuero y regulable en altura; computador abordo, entre otros.
También posee: dirección asistida; frenos ABS+EBD; doble airbags; sensor de estacionamiento; inmovilizador; cinturones de tres puntas en asientos traseros y de dos puntas en asientos plegables; sistema de anclaje ISOFIX (2x) en la segunda y tercera fila, y TPMS -monitoreo de presión de neumáticos-, entre otros elementos.
MÁS HEXAGONAL, MÁS MODERNA
Este modelo 2019 destaca por fuera por su nueva máscara hexagonal y luces LED con diseño “ojo de halcón” que la hacen lucir más moderna, más cercana a los diseños de VAN europeas, dejando de lado las similitudes con Hyundai, aunque igual tiene parecido a la nueva H-1
Estéticamente se trata de un vehículo robusto y de grandes dimensiones muy similar en dimensiones al Hyundai H-1. Sus medidas son de 5.200 mm de largo, 1.890 mm de ancho y 1.970 de alto. La verdad, actualmente, no parece un vehículo chino, por lo menos si la apreciamos con los estereotipos tradicionales, es decir formas algo saturadas, mucho cromado y recarga en el diseño, acá es exactamente lo contrario, en donde más destaca son sus grandes grupos ópticos colocados bien a los costados y abajo unos neblineros rectos que le dan más presencia a la parte delantera, con una parrilla central con cromados en listones negros y plateados. Es en extremo simple, con líneas suaves y contornos rectos.
Por los costados tiene una línea de cintura alta con unos pasos de rueda muy pequeños, se ve algo extraña. Con mayor espacio en las ruedas el vehículo luciría más. Atrás encontramos un gran portalón que abre hacia arriba que le da un amplio acceso a una zona de carga, si es que no la tenemos desplegada con sus diez asientos. Puede llegar en carga a un peso equivalente a una tonelada. En la zaga destacan sus grupos ópticos colocados muy en los costados, en donde no es tan estética, está mejor lograda adelante.
Este MPV (Vehículo Multipropósito), nos recibe con cómoda butacas que pueden llegar a albergar hasta 10 ocupantes, distribuidos de la siguiente manera: 2+3+2+3. Sin duda aquí JAC apostó por la configuración más amplia, pero sacrificando el uso para todo tipo de personas, ya que actualmente es Clase A. Los asientos tienen un agradable revestido en tela gris, eso si, con una escasa sujeción lateral, pero si, muy cómodos.
El tablero de instrumentos y la consola central presenta un acabado bastante correcto. El cuadro de mandos dispone de relojes analógicos dispuestos circularmente: velocímetro, indicador del nivel de combustible,computador de abordo con monitor gráfico de seguridad monocolor (de buenas dimensiones), más allá el tacómetro, indicador del nivel de temperatura del refrigerante del motor. Me gustó que sume tanto neblineros delanteros y traseros.
El volante es también de sus puntos altos, posee un agradable tacto, y tiene algunos mandos satelitales para el sistema de audio y para contestar o recibir llamados vía BT. La consola alberga el sistema de audio AM/FM/MP3/AUX/USB con seis altavoces, con Buethooth y un display algo pequeño. Otro elemento que nos gustó es la presencia como elemento de norma de resposabrazos laterales regulables, los que compensan, en el caso de las plazas delanteras, de la presencia de una bandeja casi plana portaobjetos entre ambos asientos. La posición de la palanca de cambios, típica de vehículos de este tipo, resulta muy cómoda, tiene sexta, de engranajes muy precisos.
Los comandos del eficiente sistema de climatización están en una posición inferior, algo lejos del conductor y hay que sacar mucho la vista del camino para regularlos. Dispone de botones para regular la velocidad del ventilador y temperatura de la cabina. Esta versión de pasajeros dispone de un comando independiente digital, ubicado en el techo, al alcance de los ocupantes de la segunda fila de asientos. En general, las terminaciones son buenas y dentro del promedio de lo que han mejorado los vehículos del segmento comercial.
UN EFICIENTE 1.9TD GREENJET
Bajo el capó equipa un motor turbodiésel Green Jet 1.9L CTI de inyección directa common rail, intercooler de 134 caballos con una transmisión mecánica de seis velocidades y tracción trasera. Estos motores con tecnología Green Jet aumentan la eficiencia y mejoran el rendimiento, rebajando las emisiones contaminantes. El modelo alcanza los 15.3 km/lt en carretera, según 3CV. En Rutamotor logramos un promedio de 14,2 km/l, bien para sus dimensiones y peso.
Esta planta motriz entrega par motor de 310 Nm entre las 2.000 a las 2.800 vueltas, que envían la fuerza al eje posterior por medio de una caja manual de seis marchas. Es muy fácil conducirla, la dirección es bastante más directa que otros utilitarios que antes manejamos, es asistida hidráulicamente y está muy bien calibrada, se endurece con la velocidad, lo justo y necesario y es muy suave en maniobras a poca velocidad, incluso al estacionar. También ayudan a este confort y buen andar que los grandes espejos laterales y que tenga un gran vidrio en el portalón trasero.
La suspensión es muy suave -con algo de cabeceos al frenar-. Actualmente esta Refine debe ser unas de las VAN más cómodas de manejar. Si cerramos los vidrios, llegan pocos ruidos del motor al interior, aunque si la forzamos un poco más, estos si se sentirán, pero está dentro de lo normal.
En resumen, esta nueva Refine mejora bastante. Tiene un mejor andar, terminaciones y calidad percibida. Se acerca bastante a lo que ofrecen modelos más consolidados con un precio todavía inferior a sus pares. ¿Qué opinas?
