Uno de los primeros modelos que probamos fue el Hyundai Getz 1.4 2007. Sin duda un producto exitoso que según señalamos en esa oportunidad era un «modelo que satisfacería las exigencias del cliente de hoy, sin otorgar estridencias y con un sentido muy práctico y equilibrado». La moda fuera de carretera es tal, que incluso los pequeños utilitarios llevan ya un tiempo sumándose a la lista de modelos de apariencia off road. Así existen en el país modelos como el Citroen C3 XTR, el VW Crossfox, el Fiat Panda 4×4 e Idea Adventure, por nombrar algunos. Y hoy el «aventurero» Getz Cross busca incrementar esos atributos.
El Getz Cross toma la base de los Getz normales y a los cuales añade unos parachoques específicos, molduras plasticas laterales en negro y una altura al suelo un tanto más elevada. Además, presenta nuevas llantas con neumáticos Dunlop y espejos retrovisores con enchapado en plata. También se incorporan unas barras de techo, que mejoran el aspecto del conjunto.
Este modelo se asocia al motor 1.4 litros con 94 CV que testeamos en Rutamotor, un motor que no tendrá problemas para mover con soltura este modelo. La tracción se mantiene a las ruedas delanteras. Entremos en detalle. Como decíamos la actualización del Getz consiste en la incorporación de una nueva máscara, unos focos delanteros levemente alargados, tapabarros, llantas y neumáticos más grandes que permiten mejoras dinámicas que son bastante importantes. De serie tiene airbag frontal para conductor y pasajero, dirección asistida, asiento posterior abatible, volante regulable en altura, cierre centralizado, alzavidrios delanteros eléctricos y radio CD con MP3. Su precio: $7.190.000.
GRANDE POR DENTRO, LLAMATIVO POR FUERA
El interior del nuevo Getz no presenta modificaciones importantes. El habitáculo y tablero son los mismos que en las versiones «normales», sin siquiera un logotipo, tipología o un tapiz distintivo que identifique a esta nueva versión. Algo que a nuestro juicio debió ser considerado. Su postura de conducción es elevada y cómoda gracias a la amplia superficie acristalada y el gran parabrisas delantero la visibilidad es muy buena. Ahora si usted es muy alto encontrará que el asiento queda excesivamente cerca del volante. Pero pese a ello no es difícil elegir la posición ideal.
El maletero, aunque de una capacidad reducida, tiene formas muy regulares y una buena altura. En su exterior, específicamente en el frontis es donde se concentra la mayor cantidad de elementos nuevos. Acá encontramos unos ópticos estilizados, parachoques deportivo, amplias molduras negras y unas llantas deportivas de 15 pulgadas, acompañadas por unos notables neumáticos Dunlop Sports de perfil 50. Atrás es casi igual a su predecesor o hermano «común y silvestre». Ahora en los costados hay dos grandes barras que lo hacen una versión más personalizada y que nos confirman su espíritu aventurero.
MISMO MOTOR
La planta motriz es la archiconocida 1,4 litros y 94 caballos a 6.000 revoluciones, que está unida a una transmisión mecánica de cinco marchas. El motor destaca la gran energía y nerviosismo que emana de esta pequeña unidad bencinera. Las revoluciones suben rápido hasta las 3.000 vueltas, luego de ello decae ostensiblemente. El motor resulta ruidoso en frío, y a partir de los 130 km/h hora el sonido de la planta motriz se hace excesivo. Su consumo es muy reducido (15 km/lt promedio).
Su manejo es muy fácil, gracias a una dirección precisa y con una adecuada cantidad de asistencia, una amplia visibilidad y una caja de cambios con engranajes precisos y cómodos. Su dirección es muy precisa y con la adecuada asistencia. El «fuerte» del Getz Cross, a nuestro juicio, están en su excelente estabilidad y agarre, gracias a unos notables neumáticos Dunlop Sports que permiten el paso por curvas con total soltura como que estas no existieran, lo que permiten un comportamiento más de deportivo que un modelo urbano con aspecto «off road· la dirección hace buena parte del trabajo, con un grado de precisión que asombra.
Por ello lo consideramos como un muy buen auto para maniobrar el ciudad, más que para fuera de carretera. En pavimento su manejo es equilibrado, la suspensión afrontan bien los caminos irregulares además de una dirección que transmite con seguridad las reacciones del conductor. Fuera del camino no transmite sensaciones extrañas, pero no es su fuerte. Los frenos son buenos, aunque el pedal con un tacto algo duro. Algo totalmente mejorable si usted le advierte a su mecánico.
En resumen, el Getz conjuga perfectamente su carácter de «deportista extremo» con su buen comportamiento en carretera y ciudad dado el bajo consumo de su planta motriz y su excelente agarre. En contra la falta de algunos elementos de equipamiento como aire acondicionado o la falta de un carácter distintivo en su interior que resalte el espíritu aventurero de este modelo.
LO BUENO:
- Motor elástico y económico
- Estabilidad y dirección precisa
LO MALO:
- Falta de equipamiento
- Interior plano
- Precio
CARACTERISTICAS TÉCNICAS
Motor: 4 cilindros, 16 válvulas y 1.399 cc
Potencia: 94 CV @ 6.000 rpm
Tracción: delantera
Transmisión: mecánica de cinco velocidades
Suspensión delantera: independiente McPherson
Suspensión trasera: Puente rígido
Frenos: discos adelante y tambores atrás
Neumáticos: Dunlop Sport 195/50 R15
Peso en vacío: 1.510 kilos
Maletero: 254 litros
Estanque: 45 litros
