Hoy les estuvimos contando sobre el estreno en sociedad del nuevo Suzuki Swift 2018, el hatchback compacto de grandes ventas del frabricante japones y que en 2016 superó las cinco millones de unidades fabricadas. Lo tendremos en Chile con con precios desde los CLP $8.790.000 (sin bonos de la marca) hasta los CLP $10.690.000 en versiones 1.2 litros aspirado (que probamos por más de 200 kilómetros entre Santiago y la V Región para terminar en Valparaíso) y la nueva 1.0 turbo Boosterjet. Cuenta con garantía de 3 años o 100.000 kilómetros. Todas las versiones de nuevo Swift son japonesas.
En el mercado chileno y también dentro de Latinoamérica compite con modelos como el Peugeot 208, Citroen C3, Renault Clio, Ford Fiesta, Mazda2, Hyundai Accent, KIA Rio5, Toyota Yaris y Chevrolet Onix, entre otros. En todas sus versiones incluye sistema de frenos ABS+EBD+BAS; doble airbags frontal; frenos delanteros con discos ventilados; sensor retroceso, dos anclaje ISOFIX para sillas de niños; inmovilizador antirrobo; pedales colapsables; cinturones de seguridad delanteros con regulación en altura y traseros de tres puntas, y sistema de iluminación diurna DLR. La versión GLX que probamos incorpora: doble airbags laterales y de cortina y cámara de retroceso. Estará disponible en seis colores monótono y cuatro bi-tono para elección. Según versión, contará con luces halógenas o LED con proyector; neblineros; espejos retrovisores color carrocería con y sin señalizador LED; espejos retrovisores abatibles eléctricamente; manillas exteriores de puertas color carrocería; llantas de aleación de 16”, entre otros.
SUZUKI NEW SWIFT PRECIOS JULIO DE 2017 (valores con descuento de CLP $300.000 por lanzamiento)
- New Swift GLS 1.2 5MT: CLP $8.490.000
- New Swift GLS 1.2 CVT: CLP $9.190.000
- New Swift GLX 1.2 5MT: CLP $9.590.000 (nuestra toma de contacto)
- New Swift GLX 1.2 CVT: CLP $10.290.000
- New Swift GLX 1.0T 5MT: CLP $ $10.390.000
Recordemos que esta generación hizo su estreno en el Salón de Ginebra 2017 y está totalmente renovado. Sólo en la versión tope de gama incorpora un motor turbo 1.0 Boosterjet de inyección directa de 110 hp a 6.000 RPM con transmisión mecánica de 5 velocidades, generando un rendimiento mixto de 21 km/lt, según 3CV (Consumo Vehicular). Esta versión entrega una aceleración instantánea junto a una conducción ágil y dinámica. Su turbocompresor produce un alto par motor incluso desde bajas revoluciones, lo que lo hace adecuado para múltiples y variados entornos.
Por su parte, la versión con motor 1.2 litro de nuestra prueba es un cuatro cilindros entrega 82 hp a 6.000 rpm, llega en dos tipos de transmisión: mecánica (5 velocidades) y la nueva generación de cajas automáticas CVT. Utiliza una nueva plataforma Heartect, más liviana y rígida lo que mejora la performance y su eficiencia energética. Además, mejora su maniobrabilidad con un radio mínimo de giro de 4.8 m. y su desempeño aerodinámico que reduce la resistencia al viento en 8%.
LOS CAMBIOS EN SU DISEÑO
Adelante destaca su nuevo máscara y parachoques con diseño que se aprecia más agresivo aunque no sé si más atractivo que la generación anterior, no enamora por sus líneas. Mide 3.840 mm de largo, 1,735 mm de ancho, cuenta con una altura de 1.495 mm y una distancia de ejes de 2.450 mm. El nuevo modelo es 15 mm más bajo que su predecesor y 40 mm más ancho. El maletero es el gran beneficiado: alcanza los 242 lt, 32 lt. más que antes.
Adelante lo que más destaca son sus generosos ópticos delanteros (con leds que recorren todo su entorno, de buen aspecto), insertos en una gran máscara con varios listones centrales que flanquea el logo de la marca. El parachoques de amplia superficie, le da un aire de robustez a esta zona del auto. Los neblineros son de forma circular, y van insertos muy en los costados para aumentar la sensación de ancho. Por los costados, los vidrios son amplios, mientras que el techo presenta una leve caída hacia la zaga.
Una línea de cintura en la zona media-baja recorre su perfil, desde el capó, para ascender a la altura de la tercera ventanilla y encontrarse con la línea de techo y las manillas de la puerta trasera, disimuladas por el negro del protector plástico que llega hasta la zaga. Atrás tiene soluciones más comunes, con ópticos rectos, colocados nuevaente bien a los costados..Abajo de su gran parachoque integrado destaca lel nuevo portalón, mucho más grande que en el modelo anterior. Recordemos que esta versión no cuenta con sensores de proximidad pero si cámara de retroceso.
UN INTERIOR BASTANTE MÁS ESPACIOSO
Si miramos por dentro al nuevo Swift veremos una cabina mucho más espaciosa, con una excelente altura de los asientos, lo que facilita la entrada y salida del vehículo. Ello se explica por la presencia de una carrocería que ahora es más «alta y cuadrada». Se nota su origen japonés en la materialidad y terminaciones, como la bitonalidad de su plancha de mandos y consola, o los revestimientos internos de las puertas (fondo blanco en esta unidad de pruebas).
La habitabilidad mejoró y mucho sobre todo para los pasajeros de los asientos de atrás, que me sorprendió al subirme en una parte del camino en los asientos posteriores, con buenas dimensiones para todos lados. Incorpora algunos compartimentos pero cuentro que le faltaron más a los pasajeros de atrás. Agrega la conocida radio multimedia Blaukpunt (en esta versión), de un audio que encontré apenas normal, que no destaca (pero si cumple), y que incorpora pantalla touch de 7” que contará con: manos libres con Bluetooth, navegación por GPS, entrada USB y SD, reproducción y carga de iPod/iPhone, reproducción de CD y DVD, y cámara de retroceso (según versión).
Además, de acuerdo a la versión GLS o GLX, incluirá: aire acondicionado sin y con climatizador; botón de partida (Keyless Star); control de radio al volante; manillas interiores cromadas; asiento del conductor regulable en altura; cierre centralizado con comando a distancia; control crucero; espejos y alzavidrios eléctricos; volante forrado en cuero y regulable en altura y profundidad; salida de 12V, entre otros.
El cuadro de instrumentos es como siempre funcional y tradicional con un fondo rojo (leds) que recorre el contorno del los relojes y el borde superior, de un uy buen aspecto, es tablero es de lo que más me gustó de su interior. Agrega un computador de abordo digital que condensa las siguientes funciones: Reloj, temperatura exterior, odómetro, nivel de combustible, consumo promedio, autonomía, velocidad media, tiempo de viaje y consumo instantáneo combinado.
Además, integra un excelente nuevo volante, con un grip excelente. Esta versión tiene revestimiento de cuero y unos claros mandos satelitales para sistema de audio y velocidad crucero. Al centro encontramos un atractivo sistema de climatizador unizona con pantalla de visualización digital, propio de los GLX. Falla en algunos detalles, como no integrar luz para los ocupantes de las plazas traseras y copiloto.
EL MOTOR DEL IGNIS
Su fuente motriz corre por cuenta de un viejo conocido, el motor bencinero K12M, el mismo empleado por el nuevo Ignis, con 1.197 c.c. de desplazamiento y una potencia total de 82 caballos de fuerza, asociado según versión a una caja manual de cinco marchas o automática del tipo CVT, con modalidad manual y deportiva. Ambas cajas son libres de mantenimiento por 160.000 kms u 8 años. Su relación peso potencia es de 10,3 kilos por caballo de fuerza. Su comportamiento es bastante ágil para lo que uno esperaría para un motor compacto. Lo llevamos por unos 200 kilómetros y sorprende como empuja desde la zona media, abajo es bastante más flojo. En la prueba nos dio un promedio de 19 k/l, y según indica la marca, esta planta motriz se carateriza por su equilibrio entre rendimiento y bajo consumo de combustible, alcanza un rendimiento mixto de 20,5 km/lt (MT) y 19,5 km/lt (CVT).
Recordemos que tanto el Swift como el Ignis emplean la plataforma del Baleno, la que fue adoptada al tamaño de este modelo, la que se caracteriza por su alta rigidez y menor peso. Su suspensión fue rediseñada con el objeto de tener un control altamente estable. Sorprende lo bien que está insonorizado. Esta caja manual le otorga mucha agilidad al nuevo Swift, tomando en cuenta que se trata de un auto cuyo peso neto de poco más de 900 kilos.
Se siente muy aplomado a velocidades entre los 100 y 120 km/h. Lo probamos con tres pasajeros más equipaje, manteniendo un ritmo ágil. Tiene una excelente tenida de ruta, se siente dócil, lineal, sin llegar a advertir cabeceos extraños. La suspensión copia bien, aunque con un recorrido algo escaso, con una dirección eléctrica que a pesar de ser «poco comunicativa» es la adecuada, siendo rápida y con buena asistencia en carretera. ¿Qué opinas del nuevo Suzuki Swift 2018?, coméntanos.
Fotos: Gentileza Raúl Farías
