Como decía Stirling Moss: «Las rectas son simplemente tramos aburridos que conectan las curvas». Parte importante del encanto de la Fórmula 1 se ubica básicamente en sus curvas, es difícil encontrar dos iguales. E, incluso cuando el ángulo, la inclinación, la pendiente y la velocidad de entrada de los monoplazas parecen ser similares, hay otras variables que son diferentes, como el agarre y la temperatura del asfalto.
Todos estos aspectos inciden significativamente en el esfuerzo al que se someten los sistemas de frenos, según indica Brembo. Dado que cada circuito tiene su propia historia, Brembo clasificó los 20 trazados del Campeonato de la Fórmula Uno 2017. Para ello utilizó una escala de 1 a 10, directamente proporcional al esfuerzo realizado por los frenos en los diferentes circuitos. Los circuitos de Abu Dabi, Ciudad de México y Montreal recibieron la máxima puntuación, que equivale a un esfuerzo Muy Duro (Very Hard) para los frenos.
Un escalón por debajo (puntuación 9) se sitúa el circuito de Bahréin identificado como Duro (Hard), la misma categoría a la que pertenecen los 5 circuitos que han recibido una puntuación de 8: Bakú, Melbourne, Monza, Spielberg y Sochi.
Por el contrario, los circuitos más fáciles para los sistemas de freno (Very Easy) son los de Interlagos, Silverstone y Suzuka: la puntuación de 4 demuestra que estos trazados también presentan sus dificultades para los frenos, y que no deben subestimarse. ¿Qué opinas?