Infiniti Q60 2.0T 208 CV 7AT 2018: Escultura en movimiento

por Gabriel Baeza

Pocas veces nos toca probar modelos que enamoren tanto a primera vista como el escultural modelo de la marca japonesa Premium Infiniti, el Q60. Se trata de la segunda de este coupe, que llega a ofrecer no solo una cara bonita, sino que un manejo entretenido y un muy buen nivel de terminaciones generales, dentro de un segmento dominado por modelos más tradicionales de marcas europeas.


La marca japonesa Infiniti, representada en Chile por SK Bergé, nos presto este interesante modelo que fue lanzado el año 2017 y que sigue los trazos estrenados por su hermano Q50, aunque más esculpidos y adaptados a su forma de coupe. Compite con las marcas tradicionales en este segmento y modelos como el Audi A5/S5, Bmw serie 4, Mercedes Benz Clase C Coupe y Lexus RC. Si agregamos competidores no Premium, podríamos agregar el Ford Mustang y Chevrolet Camaro, dentro de la acotada oferta de coupes de este tamaño. Esta versión se comercializa a un precio de CLP $29.990.000.

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ESCULTURA SOBRE RUEDAS

Puede sonar algo exagerado, pero al menos personalmente encuentro que el diseño y líneas del Q60, se encumbran en lo mejor que se ha lanzado en el último tiempo. Comenzando por unos focos delanteros con luces diurnas LED del tipo ojo de águila,  una gran máscara delantera con malla tipo panal de abejas, neblineros, sensores de estacionamiento y cámara frontal. Su capot cuenta con diversas nervaduras, que siguen las líneas del pilar A y le dan un gran atractivo y fluidez.

En su línea lateral, vemos unas hermosas llantas de 19 pulgadas, calzadas en unos enormes neumáticos Dunlop en medida 255/40 del tipo Runflat anti pinchazos. El diseño de las llantas de cinco rayos cuádruples, con color aluminio y gris, le da un look elegante y deportivo. La zona vidriada es acotada, y nos encontramos sin marcos en las puertas, y una ventana trasera que termina con una curiosa y estilizada forma. Todo el marco está cubierto por un cromado, al igual que varios detalles en su exterior.

La parte trasera esta asimismo muy bien lograda, con unos focos traseros que repiten las formas de los delanteros en sus luces LED, una salida de escape a cada lado, un alerón integrado en la forma del maletero, sensores, cámara de estacionamiento  y una zona baja de color negro brillante. Realmente, solo podemos pensar en la máxima nota cuando analizamos su diseño.

Sus dimensiones exteriores alcanzan los 4.690 mm de largo, 1.850 mm de ancho, 1.395 mm de alto, con una distancia entre ejes de 2.850 mm. Su peso en orden de marcha alcanza los 1.684 kg, mientras que el maletero tiene una capacidad de 341 litros y el estanque de combustible alcanza los 80 litros.

Dentro de su equipamiento exterior principal, podemos mencionar el sunroof eléctrico, limpiaparabrisas con sensor de lluvia, luces de circulación diurna LED, neblineros delanteros y traseros LED, luces principales LED con sistema de ajuste automático de altura e intensidad, cámara de 360° y sensores delanteros y traseros.

UN INTERIOR PREMIUM

Ingresando a su habitáculo, nos volvemos a sorprender gratamente con lo que nos espera de este Infiniti. Su volante de tres rayos, forrado en cuero y con detalles de aluminio, alberga muchos controles del sistema de audio, computador a bordo y control de velocidad de crucero, pero extrañamos unos Paddle Shifters para poder controlar su caja de cambios.

El tablero de instrumentos es muy tradicional de la marca, con dos grandes relojes análogos, un tacómetro a la izquierda junto con termómetro de refrigerante y un velocímetro que marca hasta 280 km/h (algo positivo) a la derecha, junto con un medidor de nivel de combustible. Al centro nos encontramos con una pantalla a color del computador a bordo, con bastante información para su conductor.

La plancha central cuenta con dos grandes pantallas, la de arriba de 7” donde podremos visualizar la cámara de 360° en sus diferentes vistas y el navegador manejado por voz, y la de debajo de 8”, que nos permite controlar de manera táctil, las funciones del climatizador, computador a bordo, sistema de audio, etc. A los lados y abajo de esta segunda, nos encontramos con botones para ajustar temperatura del conductor y pasajero, controlar la radio, el volumen y algunas funciones más, lo que se agradece ya que es mucho más intuitivo para manejarlo desde la pantalla táctil al ir conduciendo.

Los asientos delanteros son muy envolventes y atractivos, con manejo eléctrico en ambos lados, los traseros son bastante más pequeños, contando con una consola central, pero donde lo más criticable es la posición, que obliga a ir bastante recostados y que nos implica tocar con la luneta trasera si superamos cierta altura. Igualmente en caso de ser ocupado como vehículo familiar (en ciertas circunstancias especiales), cuenta con sus respectivos anclajes Isofix, para llevar dos sillas de niños de manera segura y fija. Como se podría esperar, todos los asientos cuentan con cinturones de tres puntas, y cuenta con airbags frontales, laterales y de cortina para todos sus pasajeros.

Su principal equipamiento interior incluye tapiz de Leatherette, asientos delanteros eléctricos, terminaciones en Silk Obi Aluminium, acceso sin llave y botón de encendido, espejo interior retrovisor foto cromático, parasoles con espejos iluminados, volante con ajuste en altura y profundidad, sistema de navegador controlado por voz, audio Premium con seis parlantes, bluetooth, entradas USB y Aux, por mencionar lo principal.

CON MOTOR ALEMÁN

Mecánicamente este deportivo japonés ofrece dos opciones de motores, y en nuestro caso equipa el menos potente. Se trata de un cuatro cilindros de origen Mercedes Benz, que tiene dos litros de cilindrada, turbo, fabricación con aleación de aluminio, doble eje de levas, que entrega una potencia de 208 Hp a 5.500 rpm y un torque de 258 libras-pie, entre 1.250 y 3.500 rpm, acoplado a una caja de cambios automática de siete velocidades y envía toda la potencia al eje trasero.

Su dirección es asistida eléctricamente, cuenta con suspensión independiente en las cuatro ruedas, delantera de doble horquilla y trasera multilink. Los frenos son de disco en las cuatro ruedas, delanteros de doble pistón, apoyados como podría suponerse con ABS, control de tracción TCS, control de estabilidad VDC y asistente de partida en pendiente HSA.

El rendimiento de combustible homologado por el 3CV alcanza los 9,5 km/l en ciudad y hasta 16,6 km/l en carretera. Las prestaciones que informa en otros mercados son interesantes, pero no para volverse locos: acelera desde parado hasta los 100 km/h en un poco más de siete segundos, mientras que alcanza una velocidad máxima de 235 km/h.

UN MANEJO ENTRETENIDO Y AISLADO

Ya comenzando a manejarlo, lo primero que podríamos decir es que la suavidad y confort priman en todo momento. El motor apenas se escucha, y aunque tenemos dos escapes deportivos, no parece en ningún momento que haya sido pensado en sonar de manera muy deportiva, más bien en esta versión se busca la elegancia y pasar desapercibido. Pero pasar desapercibidos puede ser por su silencio, pero no por su diseño, el que llama positivamente la atención de la gente que nos ve pasar, donde incluso nos hacen algún gesto de aprobación por lo atractivo de sus líneas. Sus distintivos focos LED hacen que se vea desde lejos y se reconozca como un Infiniti Q60 a todos los que estén familiarizados con el modelo.

La vida al interior del Q60 es muy cómoda, con unos asientos muy confortables y listos para viajes largos, con buena sujeción lateral y excelente espacio adelante. Atrás es otra historia, ya que no solo el espacio es menor, la visibilidad más escasa, la hermosa línea del techo que baja juega totalmente en contra para el espacio de la cabeza, y hasta implica a veces tener el sol directo arriba nuestro. Mejor reservar estos asientos para trayectos cortos, niños o adultos en caso de urgencia.

Recorrer la ciudad parece que es el hábitat natural del Q60, donde su motor es suficiente para movernos con agilidad, tranquilidad, una caja de cambios suave, una suspensión que filtra muy bien todo lo que pasa bajo nuestro aun con sus enormes llantas de 19 pulgadas, las ayudas electrónicas para cuando debemos estacionarnos y una altura no extremadamente baja. La cámara de 360° hay que destacar que no solo es muy práctica, sino que tiene una excelente calidad y definición, apoyada por los sensores delanteros y traseros, los que se agradecen para no dañar su hermosa carrocería. También contamos con varias opciones de manejo según nuestro gusto: Sport/Standard/Snow/Personal.

Ya en autopistas vemos que mantiene sus excelentes maneras, su motor empuja bien hasta casi las 6.500 rpm, sin mayor escándalo, la caja de cambios acompaña con rápidos movimientos y la velocidad sube sin problemas por sobre las máximas legales. Sin duda que en otro país con mayor flexibilidad con la velocidad como Alemania, debe ser una delicia poder superar los 200 km/h, que parecen ser alcanzables y superables sin problemas.

Ya tratando de buscarle un comportamiento más deportivo, vemos que si bien su chasis se siente muy bien ajustado, con una tracción trasera de verdad, buena calibración de suspensión, frenos contundentes, dirección rápida, vemos que el conjunto motor y caja no alcanzan a poner en aprietos al chasis. El motor sin bien es alegre, se queda corto para los que busquen sacarle la quinta esencia deportiva al Q60, donde además extrañaremos unas paletas de cambio para manejar su caja.

Para este tipo de clientes, es sin duda recomendable pagar la diferencia que existe y subirse al Q60 con el motor de seis cilindros, 3.0 litros biturbo, que alcanza los 400 Hp y 350 libras pie de torque, con paletas de cambio, frenos de cuatro pistones adelante y varias mejoras en su equipamiento.

Los puntos más bajos de este modelo los encontramos en algunos faltantes de equipamiento, el manejo de su sistema de multimedia, los gráficos del sistema de navegación y posiblemente el espacio trasero, este último común a casi todos los modelos que compiten en este nicho de coupes deportivos.

Como conclusión, nos encontramos con un modelo realmente interesante, que no solo tiene un nivel de diseño fantástico, buenas terminaciones y un manejo entretenido, sino que representa una excelente opción para los que quieran salirse de las marcas tradicionales y subirse a algo más exclusivo, donde el exclusivo viene de lo poco masiva de la marca en nuestro país. ¿Qué opinas?

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