Revisando unos videos en Facebook, Youtube, me encontré con uno que marcó una época, el clásico noventero OutRun (en realidad creado por 1986 pero llegó a Chile después), cuando muchos de los que ya vamos por los 35-40 años ibamoa a «Los Delta» o el local de videjiegos del momento directamente a jugarlo. Era un imperdible. Me acuerdo que no podía pasar más de la cuarta etapa, o era muy difícil o yo muy malo.
La iinformación dice que Outrun fue un videojuego de carreras creado en 1986 por Yū Suzuki y Sega-AM2, y publicado inicialmente para juegos de salón (como no recordar la cabina con asientos, volante y caja de cambios con Low y Hi, otro clásico). La idea es recorrer cinco etapas antes de que se terminara el tiempo. Para conseguirlo había que ponerse bajo los mandos de un Ferrari Testarossa descapotable rojo con una hermosa rubia al lado. La invitación era imperdible, ¿o no?
Las cabinas tenían dos versiones de sentarse: el Deluxe, que integraba una pantalla en color de 26 pulgadas y un asiento moldeado a medida, mientras que el Standard aparecía una pantalla color de 20 pulgadas con un diseño más simple.
DE QUE SE TRATABA Y SU MÚSICA
Este juego arcade nos permitía elegir la música de fondo. Había por ejemplo una banda sonora con música de playa relajado (PASSING BREEZE), muy similar en estilo y tono a los populares grupos de los 70 / 80 japoneses de jazz fusión, y algunos ritmos latino-caribeños tipo Miami Sound Machine (MAGICAL SOUND SHOWER y SPLASH WAVE). Eran tres pistas seleccionables en una estación FM antes de partir en nuestro flamante Testarossa. Esta música fue compuesta por Hiroshi Kawaguchi, que había compuesto las bandas sonoras de otros juegos de Sega y fue parte de la banda oficial de Sega en el momento: la S.S.T. Band.
LAS ETAPAS
Para llegar a la meta había que recorrer cinco etapas, al final de cada etapa el camino se dividía en dos y se podía elegir la siguiente etapa entre dos posibles, sólo la primera (Coconut Beach) estaba presente en todas las partidas. Una vez tomada la bifurcación del final de cada etapa se cruzaba una meta volante (Check Point) que aumentaba el tiempo restante.
Cuando este tiempo llega a 0, la partida acaba y un mapa aparecía mostrando las etapas recorridas. Ahora, si llegábamos hasta el final de las cinco etapas (nunca pude) mostraba cada final diferente, si consideramos que había cinco opciones de final dependiente del camino elegido. Un clásico que muchos de nosotros recordaremos con cariño. ¿Lo jugaste alguna vez?, coméntanos.
