Después de que se le había perdido la fé a las promesas y acusaciones de venta de humo, y de que casi todo era para lavar dinero, Faraday Future (la startup de vehículos eléctricos apoyada por fondos chinos) finalmente presentó un concepto de lo que dicen será su tope de línea, el FF 91.
Por si no lo has escuchado antes, se trata de un vehículo eléctrico, que se presenta como la «segunda generación de modelos autónomos»; una evolución de lo que marcas como Tesla (bueno, la única en realidad) han presentado hasta ahora, y un ejemplo de lo que serán los vehículos autónomos eléctricos del futuro.
La carta de presentación es su nuevo sistema autónomo, compuesto por 10 cámaras adelante y atrás, 13 radares de corto y largo alcance, 12 sensores ultrasónicos y un sofisticado 3D LIDAR (Light Detection and Ranging o Laser Imaging Detection and Ranging, radar que utiliza un haz de luz pulsado) Durante la presentación hicieron uso del sistema para que encontrara un lugar donde estacionarse, ya que según ellos esa preocupación será cosa del pasado. Fue el mismo vicepresidente de Investigación y Desarrollo, quien junto al principal soporte económico de la compañía quisieron demostrar lo que era capaz el sistema autónomo, a través del control remoto mediante una app en el smartphone.
Según Faraday Future, el FF 91 tiene una potencia de casi 1000 hp, que le permiten llegar a los 100 km/h en 2.4 segundos, que lo haría el vehículo eléctrico más rápido de la actualidad. Los motores eléctricos son alimentados por un kit de baterías de 130 kWh, que le darían una autonomía estimada de casi 600 kilómetros.
Ya anunciaron que se puede hacer las primeras 300 reservas, previo pago reembolsable de USD$5000, aunque aún no dicen cual será el precio final. Se espera que las primeras unidades se entreguen durante la primera mitad del 2018, aunque aún ni siquiera han comenzado con la construcción de la fábrica, por lo que es probable que esta fecha se atrasa (si es que realmente llegan a comercializarlo).
