En Alfa Romeo al parecer no están muy satisfechos con el desempeño del nuevo Giulia, el largamente esperado sedán de tracción trasera de la compañía, que estuvo largo tiempo en desarrollo pero no ha logrado despertar suficiente interés de los compradores.
A pesar de que lo hicieron pensando en tener un rival para los sedanes medianos de BMW, Mercedes Benz y las otras marcas premium (incluyendo una versión de performance, que al menos en papel es mejor opción) sigue siendo el último en ventas del segmento, con apenas 2500 unidades vendidas en EEUU (mercado al que vuelven, por lo que es el más importante para ellos) Para comparar, el siguiente modelo en ventas, el Jaguar XE, tiene el doble de unidades vendidas a la fecha.
Todo suena mal, pero el jefe global de Alfa Romeo no está preocupado por los números, ya que tiene claro que no iba a ser un superventas. Además tienen claro que en EEUU el segmento que se lleva todas las ventas es el de los SUV, por lo que el Stelvio, el SUV de Alfa Romeo, tendrá la dura tarea de levantar las ventas de la marca, para lograr posicionarse en ese mercado, donde los italianos tienen el mismo estigma de los ingleses: vehículos muy entretenidos pero poco confiables, y muy difíciles de revender.
